Ciudadanos Observando señala que hay denuncias en las que se ha detectado plagas de chinches y cucarachas que han infestado varias áreas del hospital, centenas de gatos y sus crías se pasean libremente dentro de las instalaciones (fomentado por algunos médicos), todo lo anterior desafiando la higiene y seguridad sanitaria que se espera en una institución médica de este calibre.
Las denuncias sobre la presencia de bacterias como el staphylococcus, que ya han cobrado la vida de pacientes que han pasado por los quirófanos, aunado a otros animales nocivos, han subrayado la grave negligencia en mantenimiento y limpieza que persiste en el hospital. Esta situación no solo ha impactado la imagen pública del centro médico, sino que también ha generado preocupaciones legítimas sobre los riesgos para la salud pública, especialmente en un contexto donde la limpieza y la higiene son críticas para prevenir infecciones hospitalarias.
No obstante, estos problemas no se limitan solo a las condiciones físicas del hospital. El conflicto con los sindicatos y empleados de la salud ha exacerbado aún más la situación. Los trabajadores han protestado por condiciones laborales precarias, retrasos en pagos y la falta de equipo médico adecuado, llegando incluso a huelgas que han paralizado parcialmente la atención médica.
La escasez crónica de medicamentos es otro punto de crítica en la gestión de Ricardo Gallardo Cardona. Pacientes y personal médico han reportado la falta de suministros básicos, afectando directamente la capacidad del hospital para proporcionar atención médica oportuna y de calidad.
En respuesta a estas acusaciones, el Gobierno ha prometido mejoras y soluciones rápidas, sin embargo, los residentes y personal del hospital continúan expresando su escepticismo ante las promesas incumplidas y la falta de acciones concretas para abordar estos problemas fundamentales.
La urgencia de una intervención efectiva y una gestión más transparente se hace cada vez más evidente en un momento crucial para la salud pública en el estado, lamentablemente seguimos viendo cómo se prioriza “la fiesta” para las masas en lugar de apostar a temas cruciales que puedan sentar las bases para el futuro de nuestra juventud en San Luis Potosí.