El sur de la Ciudad de México fue sorprendido la tarde de este jueves por intensas lluvias y severas inundaciones registradas en la zona de Barranca del Muerto y San Ángel, en los límites de la demarcaciones de Benito Juárez y Álvaro Obregón. En imágenes que circularon en redes sociales se observó como varios vehículos terminaron varados al quedar bajo el agua.
Entre las zonas más afectadas se encuentra la calle Río San Ángel en Álvaro Obregón, donde dos vehículos resultaron con grandes afectaciones, uno de ellos terminó arriba de una reja de poco más de 2 metros, por lo que tiempo después fue removido por una grúa de la Ciudad de México.
En la colonia Atlamaya los habitantes informaron a medios de comunicación que el agua alcanzó los 3 metros de altura y provocó destrozos en fachadas y puertas. De acuerdo con las primeras versiones, el dueño de uno de los vehículos se encontraba de visita con un familiar cuando se enteró que su automóvil quedó arriba de una reja.
Reportes de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) confirmaron que la lluvia alcanzó los 58.9 milímetros es decir, 58.9 litros por metro cuadrado colapsó los colectores del drenaje, provocando severas inundaciones en colonias como:
Jardines del Pedregal
San Ángel
Guadalupe Inn
Florida
Chimalistac
Barranca del Muerto
Este jueves 18 de julio, se registró un encharcamiento sobre Barranca del Muerto a la altura de la Avenida Anillo Periférico que dejó a decenas de vehículo atascados en la inundación y a peatones intentando cruzar con el agua hasta las rodillas, en la Ciudad de México.
Fueron policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del sector Alpes, quienes rescataron a varios automovilistas que se quedaron varados dentro de sus vehículos, debido a que el nivel del agua subió poco más de 20 centímetros de altura.
Elementos del Cuerpo de Bomberos y Policías rescataron a una persona, a quien sacaron del vehículo cargando. Mientras tanto, los peatones esperan en la banqueta en las zonas donde no está inundado, quienes esperan a que no esté inundado para continuar su camino hacia sus respectivos hogares.
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