San Luis Potosí, SLP.- Con notable tristeza en la mirada, la señora Ana Karen Tovar Sánchez, originaria del municipio de Cárdenas, San Luis Potosí, llegó la mañana de este viernes 19 de julio al kiosko de la Plaza de Armas, a fin de ser escuchada por los medios de comunicación y denunciar públicamente la desaparición de su esposo, el señor Mauro Lambarria, originario del municipio de Rayón, quien habría "sido levantado" el pasado 16 de mayo del presente año, suceso en el que, según relata la señora Tovar, su esposo se encontraba trabajando en un taller de hojalatería ubicado en la carretera a Ciudad Valles, cuando sujetos llegaron y se lo llevaron, esto de acuerdo al relato que el jefe de éste le habría proporcionado al suegro de doña Ana Karen.
Señaló que, pese a que ya se presentó la denuncia pertinente ante el Ministerio Público de Rayón, al día de hoy no han recibido noticia alguna de su paradero.
"Hasta ahorita no tenemos noticias de él, la verdad no nos dan respuesta, no nos dan resultados de nada; nos dicen que no hay novedad, que no hay nada (...) la mera verdad no hay ayuda de nada", agrega la señora Tovar.
Asimismo, agrega que desde el día de la desaparición de su esposo, han realizado acciones que están a su alcance y posibilidades, como difundir la ficha de búsqueda en redes sociales," la mera verdad estoy sola con mis hijos nada más".
Agrega que de igual manera no han recibido ninguna señal por parte de los presuntos delincuentes, por lo que la angustia e incertidumbre, aumenta cada día; no hemos recibido ninguna noticia, ninguna llamada, ni un mensaje, nada, dijo.
Doña Ana Karen cree que el posible motivo del "levantón" de su esposo, fue a causa de una confusión por parte del grupo armado, "mi esposo es un hombre muy bueno, trabajador que día a día luchaba por llevar alimento a la casa, apenas tenía tres día trabajando ahí".
Señala que la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, le proporcionó la información de la presencia de tres unidades (camionetas), habiendo encontrado una de ellas, dos credenciales del señor Mauro.
"Somos de escasos recursos, pero hay que hacerle la lucha, pido ayuda de quien nos esté viendo, nos ayude y nos apoye, estoy sola con mis hijos".
Con evidente desesperación, la señora Ana Karen pide a las autoridades apoyo y respaldo a su caso, "que nos apoyen, qué hagan lo posible, somos una familia que necesita de su esposo y mis hijos de su papá".
