Las grandes acciones tecnológicas tambalearon este miércoles como parte de una liquidación más amplia, lo que resalta el cambiante régimen del mercado de la semana pasada ya que parecen avecinarse tasas de interés más bajas y los inversores ven cada vez más probable una presidencia de Trump.
El índice Nasdaq Composite cayó un 2,4%, una pérdida más amplia que la caída del 1,2% del S&P 500 y la ganancia del 0,2% del Promedio Industrial Dow Jones. Entre los perdedores más notables de este miércoles estuvieron Nvidia (las acciones cayeron un 5%) y Apple (-3%), ambas enfrentaron una presión a la baja debido a las preocupaciones sobre sus unidades clave en China después de que el presidente Joe Biden supuestamente tomó medidas para frenar el acceso de China a los chips semiconductores de alta gama y el expresidente Donald Trump promocionó la perspectiva "fenomenal" de aranceles a los productos chinos en una entrevista con Bloomberg Businessweek publicada el martes por la noche.
Las siete magníficas acciones tecnológicas de megacapitalización: Alphabet, Amazon, Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla cayeron más del 1%, perdiendo más de 400 mil millones de dólares de valor de mercado agregado. La rara caída de los siete magníficos, con una caída promedio del 5,8% en la última semana, es la evidencia más reciente de un importante reposicionamiento del mercado desde que los datos de inflación del jueves, mejores de lo previsto, reavivaron las apuestas de tasas de interés significativamente más bajas y las probabilidades de apuestas comenzaron a favorecer fuertemente a Trump en las elecciones presidenciales de noviembre.
Desde el miércoles pasado, el Dow Jones ha subido un 3,4% en comparación con el descenso del 2,4% del Nasdaq, concentrado en tecnología, ambos superados por el repunte del 10% del índice de pequeña capitalización Russell 2000, lo que demuestra la creencia de los inversores de que las tasas más bajas pueden ayudar a estimular el crecimiento de las ganancias en todas las empresas estadounidenses, en lugar de solo en el puñado de líderes en inteligencia artificial, como ha sido el caso en los últimos trimestres.
Los sectores de energía y finanzas del S&P subieron un 4% cada uno durante la última semana, superando las caídas del 4,4% y 4,7% de los servicios de tecnología de la información y comunicación, y las subidas de los bancos y las compañías petroleras probablemente se remontan a las promesas de Trump de una regulación más ligera en las industrias, abriendo la puerta a mayores ganancias .
ANTECEDENTES CLAVE
Es un renacimiento para las empresas de pequeña capitalización, largamente olvidadas: el Russell 2000 registró su mejor período de cinco días en relación con el S&P desde el miércoles pasado hasta el martes, según el estratega de Charles Schwab, Kevin Gordon.
El índice Russell 2000, que sigue el comportamiento de 2.000 empresas estadounidenses que cotizan en bolsa con un valor de mercado medio de unos 1.000 millones de dólares, ha subido un 11% en lo que va de año , frente a un rendimiento plano hasta el miércoles pasado.
Los operadores esperan ahora que la Reserva Federal reduzca las tasas de interés desde un máximo de 23 años a partir de septiembre, lo que ayudará a las ganancias de las empresas a medida que los préstamos se vuelven menos costosos. Incluso después del reciente respiro , las grandes tecnológicas siguen siendo, con diferencia, las mayores ganadoras del mercado de valores reciente, siendo los sectores de tecnología de la información y comunicaciones del S&P los componentes de mejor rendimiento en lo que va de año, en un año y en cinco años.
TANGENTE
Las acciones de Nvidia acaban de entrar oficialmente en territorio de corrección, con una caída de más del 10% desde su cierre del miércoles pasado.
Las acciones de Nvidia siguen subiendo más del 140% este año, el mejor rendimiento de cualquier empresa que cotiza en el S&P en todo el año. Las acciones de Meta también sufrieron una corrección, bajaron un 12% durante la última semana, pero aún así han subido un sólido 34% este año.
CRÍTICO PRINCIPAL
"Es una mala idea hacer ajustes significativos en la cartera en función de quién crees que va a ganar las próximas elecciones", advirtió el estratega del Wells Fargo Investment Institute, Scott Wren, en una nota a clientes del miércoles, destacando los errores de las encuestas y las diferencias entre las promesas de campaña y las políticas reales.
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