Un hombre ha sido detenido en Oslo, la capital noruega, tras lanzar dos cócteles molotov contra el Palacio Real. Los artefactos han provocado un pequeño incendio que ha sido extinguido de inmediato sin mayores consecuencias.
"Ha habido llamas en el muro exterior, pero han sido sofocadas", ha explicado la Policía, según recoge el diario noruego 'Aftenposten'. La Policía ha descartado la existencia de otras sustancias explosivas.
El detenido es un hombre de unos 50 años de nacionalidad bielorrusa que ha sido arrestado y acusado de daños graves y posesión de explosivos. El sospechoso está buscado en Países Bajos.
"Es un ciudadano extranjero que no reside en Noruega. No lleva mucho tiempo aquí", ha explicado un portavoz policial, Anders Briskodden, al 'Aftenposten'.
Testigos presenciales han relatado que fue sobre las 13.00 horas cuando un individuo en una silla de ruedas eléctrica dijo que tenía una bomba y se dirigió hacia el Palacio Real.
En torno a las 14.30 horas se han reanudado las visitas al Palacio Real, interrumpidas brevemente debido al incidente.
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