El Instituto Nacional de Rehabilitación «Luis Guillermo Ibarra Ibarra» (INRLGII) de la Secretaría de Salud inauguró el 27 de junio la sala de lactancia materna para trabajadoras, que contribuye a fortalecer la salud maternoinfantil.
La subdirectora de Asuntos Jurídicos del INRLGII y encargada de poner en marcha este proyecto, Georgina García Ortega, informó en entrevista que se cuenta ahora con un espacio digno, higiénico y seguro, que salvaguarda el derecho fundamental a la lactancia materna.
Indicó que esta iniciativa diseñada con asesoría del Instituto Nacional de Perinatología «Isidro Espinosa de los Reyes», responde al hecho de que la mayor parte del personal del Instituto está compuesto por mujeres. «Con esta sala, el INRLGII favorece la lactancia, extracción, conservación y transporte de leche materna».
Resaltó que mediante la implementación de este tipo de espacios se generan entornos laborales protectores de la salud maternoinfantil, que contribuyen a mitigar riesgos para la madre como hemorragia posparto, cáncer de mama, de ovario y osteoporosis.
Asimismo, los beneficios en el ámbito laboral tienen que ver con disminución del ausentismo, reincorporación al trabajo posterior a la licencia de maternidad, fomento de la equidad de género y mayor responsabilidad social para el bienestar de las madres trabajadoras y de sus familias.
Detalló que las usuarias de la sala deberán seguir ciertas medidas de seguridad e higiene para minimizar riesgos de contaminación en la extracción láctea, entre las que destacan: el lavado de manos al entrar y salir de la sala; no ingresar con otros alimentos que puedan contaminar la leche; usar el frigobar de forma exclusiva para el almacenamiento; y etiquetar los envases con el nombre completo, área de adscripción, teléfono de contacto, fecha y hora de extracción.
Por otro lado, recomendó que el almacenamiento, la conservación y el transporte se realicen en frascos de vidrio esterilizados, con superficie lisa, boquilla ancha, transparentes, herméticamente cerrados con tapa de plástico y el contenido a dos tercios de su capacidad.
«También es necesario utilizar tres piezas de hielo reciclable por cada frasco y colocarlo en cajas isotérmicas o loncheras térmicas para su traslado, para mantener la red de frío.»
En consecuencia, aclaró que la leche sólo se refrigera cuando el bebé la toma en las primeras 12 horas después de la extracción. En caso de que la madre estime que la consumirá después, debe congelarse.
Por último, hizo un llamado a las mujeres embarazadas y a quienes están lactando a alimentar a sus hijas o hijos de forma exclusiva con leche materna durante los primeros seis meses y, de manera complementaria, con otros alimentos saludables por lo menos los dos primeros años.
Con esta iniciativa, el INRLGII da un paso en la creación de entornos laborales que apoyan la salud y el bienestar de las madres trabajadoras y sus familias.