La expectativa sobre el tipo de cambio se agravó considerablemente luego de que el mercado recopilara el sentimiento de los especialistas en economía del sector privado tras conocerse la mayoría calificada que Morena logró en el Congreso después de las elecciones y sus intenciones de llevar a cabo una serie de reformas constitucionales.
Los analistas ahora esperan que el peso cierre el año en 18.73 unidades por dólar, de acuerdo con la encuesta recabada por el Banco de México (Banxico) en junio, precio mayor al de 17.80 unidades estimado en mayo; es decir, se prevé una depreciación para la moneda nacional de 93 centavos.
Para 2025, la expectativa sobre el nivel del tipo de cambio repuntó de 18.58 a 19.36 pesos por dólar.
Esta es la primera encuesta recabada por el banco central que muestra la reacción del mercado a distintos índices macroeconómicos ya con el resultado de los comicios que dejó Claudia Sheinbaum como la virtual Presidenta electa.
En su anuncio de política monetaria del jueves pasado, Banxico dejó entrever que los resultados de las elecciones sí impactaron al peso, pero no fue claro al hacer la referencia ya que atribuyó la volatilidad en el tipo de cambio a "factores idiosincráticos".
"Se observó una importante volatilidad en los mercados financieros nacionales. El peso mexicano registró una visible depreciación. Sin embargo, más recientemente los mercados nacionales han presentado un mejor comportamiento", indicó el banco central.
Previo a las elecciones, la moneda nacional había acuñado el término del superpeso debido a su rendimiento frente al dólar e inclusive llegó a encabezar la preferencia de los inversionistas en el carry trade por encima del rand sudafricano o el real brasileño.
No obstante, ahora el peso acumula una depreciación mayor a a 7 por ciento desde el 2 de junio y de 8.3 por ciento en lo que va de 2024.
En cuanto al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), el pronóstico se redujo de 2.10 a 2.00 por ciento para el cierre de este año.
Sin embargo, una expansión por debajo de 2.00 por ciento en 2024 colocaría al sexenio del Presidente Andrés Manuel López Obrador con un crecimiento total de 5.00 por ciento, el más bajo desde la Administración de Miguel de la Madrid Hurtado, además de un estancamiento en el PIB per cápita.
Para el próximo año, el primero bajo el mando de Sheinbaum, el estimado del PIB se recortó de 1.80 a 1.78 por ciento.
Por su parte, las expectativas de inflación general para el cierre de 2024 se mantuvieron en niveles similares respecto al mes previo, de 4.27 a 4.23 por ciento.
Repunta incertidumbre por política interna
El principal factor a nivel general que podría obstaculizar el crecimiento de la actividad económica del País es la gobernanza, con 56 por ciento, de acuerdo con los analistas.
No obstante, a nivel particular, sobresalió el repunte de 10 a 18 por ciento en el factor de la incertidumbre política, acompañado de otras variables como la incertidumbre cambiaria y la ausencia de un cambio estructural en México.
La mitad de los especialistas (de un total de 40 grupos de análisis y consultoría) opina que el clima de negocios empeorará en los próximos seis meses, mientras que la otra mitad considera que permanecerá igual.
En el mismo sentido, la proporción de analistas que considera que es un mal momento para realizar inversiones aumentó de 27 a 40 por ciento.
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