El reconocido DJ Diplo enfrenta graves acusaciones por distribuir "pornografía de venganza", según una demanda presentada el jueves en California.
Una mujer, identificada como Jane Doe, alegó que Diplo grabó y distribuyó imágenes y videos sexuales de ella sin su consentimiento, según documentos judiciales obtenidos por Page Six.
La denunciante, residente de Nueva York, afirmó que su relación física con el productor ganador del Grammy comenzó en junio de 2016, tras un intercambio de mensajes sexualmente explícitos en Snapchat desde abril de ese año. La relación, según ella, concluyó en 2023.
En la demanda, Jane Doe admite que permitió que Diplo grabara algunos de sus encuentros sexuales, pero dejó claro que no quería que se distribuyera el material a terceros. Sin embargo, en noviembre de 2023, un tercero contactó a Doe afirmando haber recibido material explícito de ella y el DJ, supuestamente enviado el 14 de octubre de 2018 a través de Snapchat.
Tras ser informada por esta persona anónima, se presentó un informe policial y la policía de Nueva York emitió una orden de arresto contra Diplo por la difusión de imágenes íntimas sin consentimiento. Jane Doe solicita hasta 150 mil dólares en daños y perjuicios.
El abogado Bryan Freedman, desestimó la demanda contra su cliente, cuyo nombre real es Thomas Wesley Pentz, calificándola como infundada.
"En todos los casos en los que se ha presentado una acusación de conducta inapropiada contra Wes, el resultado ha sido el despido inmediato de una demanda falsa junto con una disculpa, una indemnización ordenada por el tribunal para Wes de más de 1,2 millones de dólares, o la lenta fracaso de un obvio intento de extorsión que no ha llegado a ninguna parte", argumentó Freedman.
La abogada de Jane Doe, Margaret E. Mabie, declaró que las acciones de Diplo representan un grave abuso de poder.
"La historia de nuestro valiente cliente es uno de los muchos secretos peor guardados de Diplo, y la presentación de este caso es su primer paso para forjar un camino hacia la justicia civil", aseveró.
Esta no es la primera vez que Diplo enfrenta acusaciones similares. En 2021, otra mujer anónima lo acusó de grabar y distribuir videos sexualmente explícitos sin su consentimiento y de haberla contagiado con clamidia. Diplo negó las acusaciones, alegando que la demanda fue presentada por una fan que se convirtió en acosadora y aseguró que todos los encuentros fueron consensuales.
