David Reza | 11/06/2024 | 12:13
Quienes esto leen, seguro pasaron por el trámite de la entrega de las calificaciones por parte de la profesora o coordinadora del grupo. Así, los que estudiaron durante el año (bueno, ya de perdida durante los exámenes), solían estar tranquilos, relajaditos, con la certeza que pasarían la materia o el año, dependiendo del nivel educativo.
Ah, pero que tal el que en clases se la pasaba jugando, molestando a los compañeros, o se ‘echaba la pinta’ y no se diga desde la prepa, cuando descubrían las delicias de la cerveza (o las novias y novios), y entonces había viernes que a partir de la tercera hora, ya se habían salido…
Pero el Día del Juicio final era inevitable… y entonces, al recibir la boleta con 3, 4 o más materias reprobadas, empezar a ver como le iban a decir los papás; y era peor, al ver con un profundo coraje, a la inevitablemente más aplicada del salón, ir a pedirle con lagrimas en los ojos al profe de Etimologías Grecolatinas, que no le pusiera 9.9, sino 10, porque le iba a arruinar el promedio.
Pues así sucedió tras la elección… la entrega de calificaciones llegó para todos los partidos y candidatos. Y las reacciones son (toda dimensión guardada), exactamente las mismas. Podemos ir agrupando a los que les fue excelente, a quienes pasaron bien la materia, los que ‘de panzazo’ la libraron, los que se van a extraordinario y a los que de plano van a dar de baja.
Entre los de cuadro de honor, pues así haya a quien no le caiga bien, está la niña Sheinbaum y en el país, a MORENA; es verdad que el joven Mario Delgado es un bully con sus compañeros, pero lo cierto es que ‘haiga sido como haiga sido’, pasó de año con un 9.5. Claudita sin duda anda rondando un 9.7, ella a lo suyo, la quisieron distraer y hacerla pelear varias veces, pero se avocó a estudiar y a su papá Andrés Manuel, le lleva una excelente boleta. La idea es que ella y MORENA, se queden con la escuela (con, no en), por muchos, muchos años.
En SLP también tenemos a un par de estudiantes de excelente calificación: el Gober Gallardo y el PVEM estatal. Y como no, si se logró pasar de año, con dos senadores (que por cierto dejaron muy lejos a sus otros compañeros), la mayoría de los alcaldes y sobre todo, 13 de los 15 diputados locales. Esto es muy importante, porque ellos serán los que pagarán las colegiaturas y redactarán y ajustarán el reglamento de la escuela, por los próximos tres años, cruciales para el cambio de dirección para el estado; Sonia estuvo justo entre ser una alumna destacada y optar por otra carrera. NO se olviden de ella, hay Sonia para mucho rato…
Aquí en el estado, MORENA pasó de panzazo y eso, solo porque fue el partido que registró más votos por Sheinbaum (no es sorprendente, la gente nomás no ubicaba a Claudia con sueter verde, si la vi durante nada más con el guinda); en todas las demás materias le fue bastante mal, en parte por el pleito casado que se traía con los jovencitos del Verde, y en parte (una GRAN parte), por problemas familiares internos, por lo que es urgente que se acerquen a terapiay se recompongan o aquí en el estado, pasaran a ser realmente intrascendentes.
¿Y que tal los reprobados? Empezando por el otrora aplicado y medio nerd, el PAN. Desde que se empezó a juntar con el PRI y el PRD, a salirse desde el jueves a echar cerveza juntos (bueno, es una forma de decirlo), con el pretexto de defenderse del bullying de los MORENA, poco a poco empezó a acumular materias reprobadas. Lo cierto es que las dirigencias tanto nacional como local, solamente se preocuparon por asegurar sus espacios, algunas senadurías, las diputaciones plurinominales, las regidurías de mayoría relativa… la verdad, una actitud poquitera que da vergüenza de un partido que antes realmente representaba a los ciudadanos.
En el PRI, se presentó el fenómeno del estudiante que aunque nunca estudió, sus papás antes eran los dueños del colegio, así que no era de 10, era de 11… pero cuando jubilaron a fuerzas a sus papás, salió a relucir que no caía muy bien, que muchos de sus amigos ‘broders’ ahora ni el saludo le daban y pues ni siquiera copiar podía. Y al igual que el PAN, al final solamente le preocupó ‘vacunar’ a los que fungen como sus dirigentes y se conformó con alguna plurinominal. En ambos casos, podemos verlo en la pugna por las dirigencias, solamente se dan para que los posteriores líderes se aseguren algo, a nivel local y nacional, así que como diría el profesor Jirafales “Todos reprobados, todos reprobados!, Qué vergüenza!!”
Y el otrora Sol Azteca, pues en el año del eclipse, terminó por apagarse. El PRD, ese chavo buena onda, primo del PRI, que prefirió irse de la casa familiar a mediados de los 80’s y que parecía tener un futuro brillante, semejó al fósil universitario que se metió a las drogas y que ya no es ni la sombra del buen tipo que casi hereda todo en 1994. Flaco, cansado ojeroso y sin ilusiones, finalmente lo expulsaron de la escuela, al no alcanzar siquiera las tres materias (3%) que le pide el plantel para seguir aunque sea recursando materias. Un triste desenlace marcado también por la inoperancia y ese mismo sentido del “todas mías” de la dirigencia, que no permitió crecer al partido.
Un caso aparte es el “Fosfofosfo”; un primo más del PRI (para variar), que se mudó a otros estados para hacer carrera, se encontró dos escuelas medio interesantes en Jalisco y Nuevo León. Luego se agarró un buen pleito de la salida con el PAN y el PRI, les dejó de hablar y no entró al grupo en el que estaban. Y le sirvió, porque se quedó con sus escuelas que ya tenía y se aseguró de pasar, con un 7.5, pero pasó y aparte, sabía que no iba a sacar más calificación… y ni parece importarle.