Una asistente profesional de vuelo compartió en sus redes sociales el motivo por el que no debes dormir antes de que el avión despegue, una explicación respaldada por expertos en salud pública
Cuando te subes a un avión, lo primero que deseas es relajarte y disfrutar del viaje. Sin embargo, una asistente de vuelo profesional, llamada Ale Padroza, explicó a través de TikTok por qué nunca debes dormir durante el despegue.
Según la experta, el primer motivo es que no te mantienes alerta ante cualquier emergencia o necesidad de evacuar el avión. Y en segundo lugar, no es sano para tus oídos.
“Viajar puede ser agotador y al subir al avión, es probable que solo quieras dormir, pero no es bueno para los oídos. También hay que recordar que el rodaje es una de las fases más cruciales del vuelo”, explica la asistente.
Coincidiendo con Ale Pedroza, el equipo de especialistas médicos de Mayo Clinic, aclaran que ella se refiere al curioso “oído de avión”.
A través de su sitio web, la explicación médica señala que formalmente se conoce como “barotrauma del oído” y ocurre cuando “la presión del aire en el oído medio y la presión del aire en el ambiente están desequilibradas, lo que genera estrés en el tímpano”.
El “oído de avión” puede provocar algunos malestares
Durante el despegue del avión o también en el aterrizaje, en ese ascenso y descenso, se produce una presión en tus oídos que necesitas igualar. Los expertos aconsejan “bostezar y tragar”, o quizás masticar un chicle.
Pero si te quedas dormido, la presión se mantendrá activa e incluso podría empeorar.
El “barotrauma del oído” u “oído de avión” también puede provocar ciertos malestares, tales como: congestión auditiva, audición apagada o pérdida auditiva leve. Los mareos suelen aparecer.
En casos más complicados, puedes experimentar dolor intenso, mayor aumento de la presión, pérdida moderada a grave de la audición, zumbidos, vértigo y hasta sangrado del oído.
Aunque el “oído de avión” no es algo que se pueda evitar, la asistente Ale Pedroza y los médicos de Mayo Clinic aseguran que hay formas de contrarrestarlo, por lo que necesitas mantenerte despierto.
Además de bostezar, tragar y masticar chicle, otra opción es colocarte tapones con filtro para los oídos. Y sientes que la presión aumenta, prueba la maniobra de “Valsalva”. Esta consiste en sonarte la nariz suavemente mientras te pellizcas las fosas nasales y mantienes la boca cerrada.
El resultado que se espera, al hacerlo correctamente, es que tus oídos liberen presión y se mantengan destapados. Una vez que el avión esté en el aire, ahora sí, a dormir.