Tras presentarse oficialmente el jersey de Chivas, Oribe Peralta fue el encargado de conceder las primeros autógrafos en la nueva piel del rebaño, sin duda el gran recibimiento por parte de la afición rojiblanca fue un aspecto destacable dentro del evento, pero sin duda algo que se robó la atención fueron los aficionados del América que se dieron cita para obtener la firma más "hermosa" de todo Chivas.

El Cepillo fue bien cobijado en la tienda Puma en la Plaza Patria en Guadalajara, donde más de un centenar de seguidores lo siguieron hasta el automóvil en busca de una foto o autógrafo. Todo comenzó con orden, Oribe atendió a más de 500 aficionados por poco más de una hora, siempre sonriente y sin importar lo que le dieran a firmar.

El problema fue para los que no alcanzaron el recuerdo con el Cepillo y se mantuvieron afuera de la tienda a la espera de la salida del atacante de Chivas, y fue ahí donde se armó el revuelo. Oribe fue escoltado por cerca de 8 elementos de seguridad que a empujones le abrieron camino hasta que logró subir al auto. A pesar del difícil trayecto, Oribe trató de mantener la calma, no se enojó y atendió a los pocos que pudo.