El mariscal de campo de los Philadelphia Eagles, Carson Wentz, volverá a jugar un partido de NFL por primera vez desde diciembre pasado que sufrió una grave lesión de rodilla.
Durante un partido de temporada regular contra Los Angeles Rams, Wentz sufrió desgarres de ligamento cruzado anterior y lateral colateral al lanzarse a las diagonales en busca de un touchdown y quedó fuera por el resto de la campaña, incluyendo la carrera del equipo hacia su primer título de Super Bowl.
Sin embargo, Wentz es optimista para su regreso y tras una larga rehabilitación que incluyó perderse los primeros dos partidos del 2018 espera no mostrar señales de óxido.
"Sólo quiero comenzar donde lo dejamos el año pasado", declaró Wentz de acuerdo a Philly.com. "Tuvimos muchas jugadas grandes el año pasado cuando estuvimos en distintas situaciones. Tercer intento, zona roja, cosas en las que realmente brillamos. Esas son cosas que queremos seguir construyendo.
"Al final del día, al igual que la ofensiva y toda la organización, siempre tengo altas expectativas. Esperamos iniciar rápido, jugar rápido, hacer clic".
Esta semana, Wentz recibió autorización médica para tener contacto y fue declarado titular para el partido del domingo contra los Indianapolis Colts.
"Me siento muy confiado moviéndome, corriendo", indicó Wentz sobre cómo espera jugar. "Incluso el año pasado nunca dije que soy un mariscal de campo corredor --nunca quiero serlo-- pero encontraré maneras de extender el tiempo en la bolsa de protección y hacer jugadas campo abajo, y no creo que eso vaya a desaparecer".
Wentz también indicó que está ansioso por recibir el primer golpe dentro del campo.
"Siempre es una buena llamada de atención recordarte que juegas un deporte de hombres", sentenció "Sé que una vez que esté allá afuera me sentiré bien. Me siento bien en las prácticas, imagino que la acción se sentirá un poco distinto".
