La esperanza, claro, es que la rodilla izquierda lesionada de Aaron Rodgers mejore conforme pase el tiempo.
La preocupación, sin embargo, es que mientras más juegue el quarterback de los Packers con la articulación dañada, ésta empeorará.
“Sí. Obviamente es una preocupación”, dijo Rodgers el miércoles. “Ojalá que esto vaya hacia el otro lado”.
Rodgers, quien pudo jugar todo el partido en el empate 29-29 ante los Minnesota Vikings con una férula en la rodilla, la cual se lesionó en la Semana 1 contra los Chicago Bears, admitió que la articulación “obviamente no estará al 100 por ciento, así que ajustaré de acuerdo a cómo me sienta e intentaré jugar así”.
“Sólo depende de cómo vaya la semana con la rehabilitación y recuperación”, señaló el pasador. “Obviamente me encantaría estar mejor que la semana pasada en cuanto a salud, pero hay factores que están fuera de mi control”.
Esto significa otra semana sin entrenar mucho. Rodgers no participó en los entrenamientos de la semana pasada hasta el sábado, en la sesión de una hora que el coach Mike McCarthy tradicionalmente tiene un día antes de los juegos.
McCarthy alteró su programación regular de prácticas de cara al juego del domingo en Washington al cancelar la sesión del miércoles, aunque no necesariamente por la lesión de Rodgers. El juego en tiempo extra ante los Vikings se jugó bajo una temperatura de 26.6 grados centígrados (80 Farenheit) y humedad del 71 por ciento que siguió a un duelo de domingo por la noche ante los Bears.
Aunque no entrenaron, los Packers debieron entregar su reporte de lesionados con una estimación del nivel de participación y Rodgers fue enlistado como no participante.
“Es obvio que veníamos de un juego de domingo por la noche, que jugamos tiempo extra bajo un clima inusual en esta parte del país. Por eso hacemos lo que hacemos”, dijo McCarthy.
Rodgers dijo que el clima caluroso del domingo en realidad ayudó a que su rodilla se sintiera mejor conforme avanzó el tiempo.
“El calor y la adrenalina definitivamente ayudaron, pero será algo con lo que tendré que lidiar un rato, semana a semana”, indicó el pasador. “No parece que vaya a haber un contratiempo mayor en este punto, asi que sólo hay que saber manejarlo e intentar estar listo para el domingo”.
Rodgers completó 30 de 42 pases con un touchdown sin intercepciones y pasó la mayor parte del tiempo en la bolsa de protección.
Corrió tres veces para ocho yardas (con una carrera de siete yardas para primero y 10). Una de las carreras se dio en una jugada de opción en tiempo extra y en la que sufrió un balón suelto. Aunque no sufrió intercepciones, los Packers convirtieron en touchdown sólo uno de cinco viajes a la zona roja.
La otra lesión de preocupación para los Packers es la del esquinero Kevin King, quien dejó el partido ante los Vikings por una dolencia en la ingle. Aunque McCarthy no cree que ésta afecte a largo plazo, reconoció que sería apresurado poner a jugar a King ante los Redskins.
