El hombre al que el equipo de Sergio Pérez le debe su permanencia en la Fórmula 1 se llama Lawrence Stroll. Él es el responsable de que hace unos días se formalizara la compra del Force India por parte de un grupo de inversionistas a los que el empresario canadiense convenció de embarcarse en esta aventura.
Muchos ubican a este empresario como el padre de Lance Stroll, piloto canadiense del equipo Williams desde 2017, sin embargo, Lawrence es una figura en el mundo de las inversiones y es mejor conocido por sus negocios multimillonarios en la industria de la moda con marcas como Michael Kors, Pierre Cardin, Ralph Lauren, Tommy Hilfiger y la firma joyera Asprey.
Lawrence, de 59 años, ocupa la posición 887 en la lista Forbes de 2018 entre las personas más acaudaladas del mundo con una fortuna que es calculada en más de dos mil 700 millones de dólares, que proviene, en su mayoría, de la venta de las acciones que tenía en la firma Michael Kors. Su pasión por el automovilismo también sobresale en su biografía.
