El objetivo en Barcelona es claro, encontrar al sucesor de Andrés Iniesta y ve en Miralem Pjanic al sustituto ideal, quien está valorado en 65 millones de euros (según TransferMarket) y es actual jugador de la Juventus,
Tottenham no vende a Eriksen y el regreso de Thiago se ve difícil por el precio en el que está tasado, casi 70 millones, de ahí que el bosnio sea nueva prioridad.
Pjanic no descarta ir al Barça, que le sigue de cerca desde que jugaba en Olympique de Lyon y en su paso por la Roma. Michael Becker, agente del jugador, declaró que es un halago el interés del club blaugrana, pero que tiene que negociar con la Juventus, que le ha puesto precio de 80 millones al equipo que quiera hacerse de sus servicios.
El mediocampista sabe que en caso de no ser traspasado al Barça podría sacar ventaja de la situación y negociar con Beppe Marotta (director deportivo de la Juventus) una mejora en su contrato.
Una pieza clave en la negociación con la Juve, sería Ariedo Braida, asesor italiano que fichó el presidente catalán, Josep María Bartomeu, por su relevancia en el panorama internacional, contactos y experiencia.
