Con el triunfo de este domingo en la final de Roland Garros 2018 de Rafael Nadal ante el austriaco Dominic Thiem por 6-4, 6-3 y 6-2, el de Manacor ha sumado su undécimo título en París y el tenis español el 35 trofeo de Grand Slam de su historia.
Nadal lleva ya 11 conquistas en el Bouis de Boulogne de París, un Abierto de Australia (2009), dos Wimbledon (2008 y 2010) y tres Abiertos de Estados Unidos (2010, 2013 y 2017). La suma asciende a un total de 17 coronas para quedar a tres del máximo ganador de torneos grandes, el suizo Roger Federer, quien no jugó en París por una lesión
El primer break del partido fue para Nadal, el español, que demostró potencia y seguridad, se quedó con los dos primeros games, mientras que el austriaco, pese a tener algunos errores no forzados, supo recuperarse e igualó la situación rápidamente.
El juego de ambos protagonistas fue muy igualado durante el primer set, sin embargo, con un par de fallos a la hora de definir, el joven de 24 años regaló el décimo game y el número uno del mundo aprovechó para quebrar y llevarse el primer parcial en 57 minutos.
En el segundo set se repitió la misma situación que se llevó a cabo en el primero. El español logró quebrar al austriaco y ponerse 3-0. Con el resultado a favor, el tenista manacorí apostó a ganar en su saque y bajó la intensidad de su juego cuando el servicio era de Thiem.
Tras un 6-4 y un 6-3, Rafael Nadal se quedó con el tercer set por 6-2 y festejó por undécima vez en París. El tenista de 32 años fue claramente superior al austriaco que no logró incomodarlo en ningún momento.
Fue capaz de algo que muy pocos han logrado, ganar a Rafael Nadal sobre tierra batida, pero el austríaco Dominic Thiem afronta un reto que parece imposible: derrotar al número 1 del mundo mallorquín en la pista Philippe-Chatrier en una final de Roland Garros.
Thiem, en efecto, sabe lo que es vencer a Nadal, y lo hizo en más de una ocasión, pero jamás en un Grand Slam al mejor de cinco sets.
El estudioso austríaco deberá pues hallar la fórmula para resolver una ecuación hasta ahora insondable; cómo hacer morder el polvo de ladrillo a Nadal en una final de Roland Garros. Diez finales jugadas por Rafa sobre la arcilla parisina, otras tantas victorias en su casillero.
Ganarle un set es ya una proeza, algo que sólo el argentino Diego Schwartzman, en cuartos de final de esta edición, ha logrado desde 2015.
Todos los que se cruzaron en su camino fracasaron en el intento ante un Nadal al que nada parece detenerle hacia su undécimo Roland Garros… sólo 13 años después de su debut en el Grand Slam parisino.
"Dentro de la humildad está el valorar lo que uno ha conseguido. Sé lo que me cuestan las cosas", afirmó Nadal el jueves tras eliminar a Del Potro.
