Los Rockets sorprendieron en el primer cuarto con una alta efectividad en tiros de larga de distancia. Eric Gordon fue factor para que la visite se quede con un parcial de 39-22.
Los Warriors sintieron la presión que involucra a este juego. Curry mantuvo los problemas de triples que tuvo en el juego pasado y Durant fue controlado.
En el segundo cuarto los dueños de casa acortaron diferencias con un marcador de 22-29. El equipo de Houston mostró serias deficiencias defensivas con la ausencia de Clint Capela.
Warriors y Rockets se fueron al descanso con un 61-51 a favor de la visita y todo el Oracle Arena entraba en pánico.
Sin embargo, apareció el poder ofensivo de Golden State que logró hacer 64 puntos en la segunda mitad, limitando a los Rockets a 25 unidades echando mucho de menos a Chris Paul que se perdió el partido por lesión.
Klay Thompson lideró a Golden State con 35 puntos que encaminaron la victoria de 115-86. Durant y Curry sumaron 23 y 29, respectivamente encabezando la ofensiva guerrera camino a una nueva final.
