El apoyador de los San Francisco 49ers, Reuben Foster, puede reintegrarse a su equipo este jueves luego que dos cargos de violencia doméstica fueran retirados el miércoles por la tarde.
La juez del condado de Santa Clara, Nona L. Klippen, desechó los cargos de violencia doméstica con la acusación que Foster causó daño corporal e impidió por la fuerza que una víctima reportara un crimen, citando "causa insuficiente" para creer que los cargos "alcanzaron el nivel" de causa probable, que es la carga de prueba necesaria para llevar el caso a un juicio con jurado.
Klippen citó en repetidas ocasiones la falta de pruebas contra Foster en los cargos de violencia doméstica. Dijo que pasó los últimos seis días investigando la "totalidad" de las pruebas y no vio ningún testimonio o evidencia física que indicara que Foster había dañado a su ex novia, Elissa Ennis.
En cuanto al cargo de posesión de armas ilegales, Klippen lo redujo a un cargo de delito menor con una audiencia previa al juicio programada para el 6 de junio a las 9:00 a.m., hora local. Klippen concedió la solicitud del abogado defensor Josh Bentley de reducir el cargo por la posesión del arma no violó la ley federal y fue adquirida de manera legal en Alabama.
Foster no realizó al salir del Salón de Justicia de Santa Clara, pero sonrió y levantó los pulgares cuando le preguntaron cómo se sentía. Sus compañeros de los Niners, Adrian Colbert y Jaquiski Tartt asistieron a la audiencia para apoyar a Foster.
Poco después de la resolución, el gerente general de los 49ers, John Lynch emitió un comunicado señalando que Foster podía volver al programa de temporada baja del equipo este jueves.
"La organización está al tanto que los cargos de violencia doméstica contra Reuben Foster fueron desechados", refirió Lynch a través del comunicado. "Como resultado, tendrá la oportunidad de reintegrarse al equipo. Se le ha dejado en claro a Reuben que su lugar en este equipo es uno que debe seguir ganándose. Seguiremos vigilando el cargo restante".
Foster fue acusado originalmente en abril luego de un incidente el 11 de febrero en su casa en Los Gatos, California. No ha participado en ninguna actividad del equipo desde entonces.
En principio, Ennis dijo a las autoridades que Foster la había golpeado hasta 10 veces, la arrastró fuera de la casa, la lanzó al suelo y la escupió en una discusión doméstica. Ennis alegó que Foster rompió su teléfono y la atacó con su perro. Entre las lesiones que sufrió Ennins estaba un tímpano roto que requirió una visita al hospital.
La decisión de la juez Klippen se produce menos de una semana después de la audiencia preliminar de Foster, en la que Ennis testificó que mintió sobre haber sido golpeada por Foster y que inventó la historia del 11 de febrero a la policía porque quería arruinar la carrera de Foster luego que él rompió con ella.
"Estaba enojada y quería acabarlo", testificó Ennis.
Cuando el fiscal Kevin Smith le cuestionó si Foster alguna vez la golpeó, Ennis respondió, "No, señor. Ni una vez".
Ennis confesó que sufrió las lesiones tras una pelea con otra mujer en San Francisco la noche del 10 de febrero. De acuerdo a Ennis, ese altercado se produjo como resultado de una disputa de tránsito y la pelea duró alrededor de 15 minutos. Un video de 22 segundos del incidente surgió posteriormente en resdes sociales y Ennis lo entregó a las autoridades luego de recibirlo de un amigo.
La NFL, que aún podría castigar a Foster con base en el cargo de armas y un arresto por posesión de marihuana en enero en Alabama, señaló que seguirá vigilando los eventos relacionados a la situación legal de Foster y que eso sigue bajo revisión.
Foster se ubicó en el segundo lugar del equipo el año pasado con 72 tacleadas en 10 partidos como novato y pareció una pieza clave en el futuro defensivo de San Francisco.
"Estoy emocionado por tenerlo de vuelta, darle un abrazo y seguir adelante", indicó el tackle izquierdo Joe Staley.
