A unas horas de iniciar la serie contra los Tigres de Quintana Roo, los Diablos Rojos del México se quedaron sin uniformes ya que les fueron robados afuera del estadio Beto Ávila, en Cancún, mientras se descargaba la utilería del equipo.
Pasadas las 5 de la mañana de este viernes, procedentes de Mérida, donde la noche del jueves terminaron serie contra Leones de Yucatán, y, luego de dejar a los jugadores en su hotel, el autobús se dirigió al estadio de beisbol.
Una vez en las afueras del inmueble, mientras los encargados del equipamiento de la novena descargaban otros utensilios, fueron robados los costales en los que se trasladan los uniformes del equipo escarlata.
Para resolver la situación, el club mandará desde la Ciudad de México los uniformes que se utilizan como local, y con ellos enfrentarán la serie ante los felinos.