El Eintracht Fráncfort se aupó a la tercera plaza de la Liga alemana, tras imponerse este lunes por 2-1 al Leipzig en encuentro marcado por las protestas de los aficionados locales, que obligaron a retrasar el inicio del partido.
La hinchada del Eintracht Fráncfort mostró su indignación por la programación de partidos los lunes, una práctica que dio comienzo en Alemania con este encuentro, abandonando sus localidades y rodeando el terreno de juego.
Una protesta pacífica pero que obligó al colegiado a retrasar más de cinco minutos el inicio de la contienda. Parón que no pareció sentar nada bien a los jugadores locales, que a los trece minutos de juego ya marchaban por detrás (0-1) en el marcador.
El joven delantero francés Jean-Kevin Augustin culminó una bonita combinación en la que jugó un papel fundamental el lateral derecho Konrad Laimer, que tras combinar con Diego Demme en la frontal del área asistió perfectamente al atacante galo.
Un tanto que pareció despertar definitivamente al Eintracht Fráncfort, que dio la vuelta al marcador en los trece minutos siguientes con los tantos del estadounidense Timothy Chandler y del ghanés Kevin-Prince Boateng, que estableció en el 26 el definitivo 2-1, tras rematar a las redes un centro del croata Ante Rebic
Remontada que permitió al Eintracht no sólo sumar los tres puntos, sino también adelantar en la clasificación al Leipzig, que se vio relegado a la quinta posición.
