Los Minnesota Vikings entran a la temporada muerta con incertidumbre total sobre su futuro quarterback, una posición extraña para un equipo que ganó 14 partidos y llegó hasta el Partido de Campeonato de la NFC.
Y por el momento, muy pocos -- si alguien -- saben cómo van a manejarlo.
Mientras limpiaban sus vestíbulos tras la derrota por 38-7 ante los Philadelphia Eagles, dos de los quarterbacks de los Vikins dijeron el lunes que no tenían indicador alguno si el equipo los quería de vuelta.
"No sé lo que me depara el futuro", dijo Teddy Bridgewater, quien pasó ocho semanas como el quarterback suplente, pero fue desactivado a favor de Sam Bradford para los playoffs. "Aún lidiando con la regla de 24 horas desde ayer, aún con eso. Así que sólo lo tomaré un día a la vez".
Bradford no estaba en el vestuario el lunes durante la sesión de acceso a los medios. Mientras tanto, Case Keenum -- quien fue el titular por 16 partidos, incluyendo los playoffs y terminó segundo en la liga con un rating de pasador de 69.7 -- dijo que no tenía información sobre los planes de los Vikings.
Cuando se le pregunto si los Vikings habían dado algún indicio, directa o indirectamente, si lo quería de vuelta, Keenum movió su cabeza y dijo: "No". Después añadió que el lunes no necesariamente era el mejor día para hacer ese tipo de compromiso.
"Todo el mundo aún tiene mucho en sus mentes desde ayer", dijo Keenum. "Hay muchas cosas en las cabezas de todos. Es un día extraño. Es la última vez que voy a estar en este vestidor con muchos de estos compañeros. Uno quiere asegurar de disfrutar eso en vez de estar preocupándose sobre otras cosas".
Keenum dijo que no tenía prioridades en términos de escoger su próximo equipo, pero hizo que le "encantó" jugar para los Vikings.
"Adoro este equipo", dijo. "Adoro estos compañeros. Adoro este equipo de entrenadores. Adoro toda esta organización. Los Wilfs [dueños del equipo] son incre[ibles. El día que firmé, recibí una llamada del dueño dándome la bienvenida al equipo.
"De arriba hasta abajo, eso se filtra -- es sencillamente la actitud, el carácter, sencillamente la cultura que tienen aquí es increíble. Sin mencionar a Minnesota. La gente ha sido estupenda. Mi miedo más grande viniendo aquí era la nieva, y no he tenido que palearla. Ha sido un gran año".
Bridgewater, de otro lado, habló por primera vez desde que el equipo tomó la decisión de descenderlo al puesto número tres entre los quarterbacks para los playoffs. La decisión abrió especulación de que no está en los planes del equipo a largo plazo tras estar casi dos temporadas inactivos tras su lesión de la rodilla en agosto de 2016.
Bridgewater dijo que no quiso especular sobre la decisión, pero dejó claro que hubiera preferido estar en uniforme.
"Eso ocurre", dijo. "Este año, piensa, ha sido la gran prueba para mí en términos de mi carácter. En un mundo perfecto, hubiera preferido haber estado en uniforme. Pero entiendo que hay que tomar decisiones para darle a este equipo la mejor oportunidad de ganar. Entendiendo eso, soy un profesional. Yo sé lo que se necesita. Solo ocurrió y lo tuve que manejar", añadió.
Cuando se le preguntó si se ve como un titular en el 2018, Bridgewater dijo: "Definitivamente, sin duda".
El entrenador de los Vikings, Mike Zimmer, está pautado para hablar con los periodistas el martes en la mañana.
