Luego de pegarse en la cabeza al intentar realizar un clavado de tres vueltas y media, el sábado en la Alberca Olímpica, Samantha Jiménez recibió una llamada de Alfredo Castillo, presidente de la Conade, pero la deportista veracruzana no lo recuerda. También se le borró de la mente el accidente, cuando fue llevada al hospital y demás detalles sucedidos entre las 3 y 4 horas posteriores.
Todo ello preocupó seriamente a su familia y demás seres queridos. Afortunadamente, Samantha ya está bien, aunque todavía hospitalizada. El médico que la atiende ha preferido que cumpla 96 horas en atención y observación y salga el miércoles, sin dudas acerca de su salud. De dos o tres semanas deberá estar alejada de toda actividad. Descansará en Veracruz y después podrá volver a Canadá, en donde reside.
"Ayer en la mañana (domingo) el neurólogo (Abraham Soto) le hizo una prueba y quedó sorprendido porque el avance ha sido rápido. Ya se pone de pie sola. Realizó ejercicios de lateralidad, la pierna hacia un lado, hacia el otro, que cierre los ojos. Rápidamente reaccionó a esas órdenes. La hizo contar, mover brazos", declaró al portal ESPN Digital Juan Jiménez, el papá de Samantha.
Las atenciones no paran hacia la clavadista ni tampoco las muestras de apoyo y deseos de pronta recuperación. "Había preocupación; tras el golpe iba inconscientemente desde 10 metros hacia la alberca. Cayó al agua como una piedra".
Explica el señor Jimenez: "Se golpeó del lado izquierdo. Por fortuna, del hombro y del brazo no se fracturó. Por el impacto tiene en la pierna entre rojo y morado. De ahí en fuera todo bien, gracias a Dios".
Ha avanzado poco a poco en su recuperación. "Sigue con el dolor de cabeza porque le hicieron una saturación de 7 puntadas, además del golpe que fue en la parte frontal de la cabeza. La abierta fue un poquito más arriba. Dice el médico que es normal y que le va a doler entre cinco y siete días".
El clavado causante del accidente podría salir de la lista de opciones de Samantha; por lo menos ese es el consejo que de broma le da don Juan a su hija. "Nunca le había pasado algo así. Este clavado se lo estaban como componiendo porque pasaba muy cerca de la plataforma; no obstante, con ese clavado fue al Mundial y no pasó nada; lo hizo de ochos y ochos y medio en otras competencias. Creo que perdió un poquito la concentración y en este deporte no se permite porque sucede esto".
