Prácticamente un año después de caer lesionado, Zach LaVine volvió anoche a las pistas. El ahora jugador de los Bulls hizo el debut con la camiseta de la franquicia de Chicago, donde llegó en junio como parte del traspaso que enviaba a Jimmy Butler a los Timberwolves.
El desgarro en la rodilla izquierda de LaVine parece historia. Titular en la velada de ayer sábado ante los Pistons, el escolta firmó 14 puntos en la victoria de los suyos sobre Detroit (107-105). En el parqué para un total de 19 minutos, el exterior encontró un perfecto socio en Kris Dann, no nos cansamos de decir, la mejor noticia de estos Bulls este curso y con quien ya jugó precisamente en Minnesota. Dunn merodeó el triple-doble con 18 puntos, 8 rebotes, 8 asistencias, 3 robos y 3 asistencias.
“Es un sentimiento increíble volver a jugar. Gran triunfo. No hay nada como salir ahí bajo las luces brillantes y jugar delante de tu familia, amigos y compañeros de equipo”, apuntó el protagonista tras el duelo. “Tuvo mucha confianza para alzarse y meter el primer triple. Jugó de manera muy eficiente”, aseguró por su parte Fred Hoiberg.
