En el partido de la NBA disputado entre los San Antonio Spurs y los Golden State Warriors, Stephen Curry tuvo uno de los mayores sustos de la temporada. En una lucha por un rebote durante el primer cuarto, Pau Gasol cayó de espaldas sobre la pierna izquierda del base de los Warriors. El tobillo de Curry quedó, durante unos instantes, atrapado bajo el cuerpo de Gasol. Esto provocó una imagen de la rodilla del jugador de los Warriors, muy preocupante, ya que parecía una torcedura en toda regla.
Por suerte, todo quedó en una anécdota, pese a varios gestos de dolor y saltos para comprobar el estado de su rodilla, Curry pudo continuar el partido sin problemas. Finalmente los Golden State Warriors se llevaron la victoria (91-112).