A Kristaps Porzingis, como él mismo ha asegurado varias veces este verano, le hubiera gustado que Carmelo Anthony permaneciera en New York para seguir aprendiendo a su lado. Sin embargo, el traspaso que terminó con Melo en Oklahoma dio con el traste a las esperanzas del letón de crecer a la sombra de uno de los mejores anotadores del presente siglo.
Tras el traspaso, el calendario se convirtió en caprichoso y situó un Knicks-Thunder para que ambas franquicias abrieran el curso. Será en el Chesapeake Energy Arena este jueves 19 de octubre. Porzingis, en su puesto de ala-pívot, defenderá a Carmelo, que se situará en esa posición para el desarrollo de la temporada en los Thunder.
Porzings aseguró, en declaraciones recogidas por ESPN, que “será extraño” medirse al que fue su compañero en la Gran Manzana durante dos temporadas. Y un reto.
“Creo que todo el mundo sabe lo que va a hacer, pero nadie puede pararlo. Va a ser un reto para mí. Lo daré todo”, señaló el báltico sobre la dura misión de proteger a los suyos de las acometidas del ahora rival Carmelo.
“Le he visto todos los días durante dos años. Sé lo que hace, cómo puede anotar”, abundó Porzingis. “Si hubiera una respuesta a lo que hace y cómo defenderlo, sería estupendo. Pero no hay una película que pueda ver y decir. ‘Vale, ahora sé cómo defenderlo’. Así que utilizaré mi envergadura todo lo que pueda.”
Jeff Hornacek, el técnico de los Knicks, también comentó el enfrenamiento individual que ambos jugadores sostendrán en ese jueves. “Porzingis conoce el juego de Carmelo y Carmelo conoco el del Porzingis. Va a ser una buena batalla”.
