Tovar, en conversación con Notimex, dijo que los comerciantes transfirieron este meteórico incremento a los consumidores, que mes a mes sufren un constante deterioro en el poder adquisitivo.

“La incesante devaluación del bolívar en el mercado paralelo dispara el precio de los productos importados y golpea la capacidad de compra de las familias que observan cómo se multiplica el costo de una amplia gama de artículos como electrodomésticos y repuestos para vehículos”, señaló.

El tipo de cambio en el mercado negro llegó a cuatro mil bolívares por un dólar, cuando el sistema cambiario controlado tiene una tasa preferencial de 10 bolívares y otra complementaria de 690 bolívares por dólar.

El catedrático de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Rafael Salcedo, compartió las estimaciones de Tovar y agregó que los alimentos han sido los más afectados por esta alza desmedida en la cotización del dólar.

“Ante la imposibilidad de obtener dólares del gobierno para importar alimentos, las cadenas de supermercados decidieron adquirir la divisa en el mercado negro para poder traer del exterior productos elaborados y así llenar los anaqueles de sus establecimientos”, explicó.

Indicó que por esta razón un litro de aceite comestible cuesta en los supermercados siete mil bolívares, un kilo de leche en polvo 10 mil bolívares, un kilo de azúcar seis mil bolívares y un paquete de caraotas negras (frijoles) 13 mil bolívares, que son niveles astronómicos.

“Son precios internacionales que el venezolano debe pagar como consecuencia de la errática política económica del gobierno, caracterizada por un enorme gasto público que no alcanza a cubrir con el ingreso petrolero, la recaudación de impuestos y el endeudamiento”, señaló.

Detalló que por esta razón el Banco Central de Venezuela (BCV) imprime bolívares sin respaldo para tapar el hueco fiscal y las deudas de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa). En 2016 llegó a fabricar billetes por el orden de 303 mil 674 millones de bolívares, cifra récord.

“El 26 de marzo de 2016 el presidente de la República, Nicolás Maduro, anunció que se disponía a ‘torcerle el brazo completico al dólar paralelo’, cosa que hasta ahora no ocurre. En todo caso, al BCV le toca explicar por qué ocurrió el hundimiento del bolívar”, puntualizó.