Londres firmó un acuerdo con Ankara para suministrar a Turquía una ayuda de 100 millones de libras esterlinas para el desarrollo de aeronaves de combate.
"También hemos acordado ampliar nuestro trabajo conjunto en seguridad aérea con un programa compartido de adiestramiento e intercambio de información", afirmó la primera ministra británica, Theresa May, tras haber rubricado dicho acuerdo con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en Ankara (capital de Turquía).
El pacto, por valor de más de unos 125 millones de dólares, incluye la colaboración del líder británico en aviación y defensa, BAE Systems, con Industrias Aeroespaciales Turcas, en la fabricación de aviones de combate.
Este acuerdo destaca el comienzo de una “relación comercial nueva y reforzada” con Turquía, ha alabado May para después añadir que el pacto prueba que el Reino Unido está “abierto a hacer negocios”.
Asimismo, calificó de “muy fructíferas” las conversaciones mantenidas con el presidente turco sobre diferentes asuntos como, Chipre, la crisis en Siria, la lucha antiterrorista y comercio en la era post brexit.
Por su parte, el presidente Erdogan sostuvo que su meta es incrementar en un tercio el intercambio bilateral, pasando de 15 600 a 20 000 millones de dólares anuales.
Ambos países acordaron establecer un grupo de trabajo en materia de comercio para explorar las formas en las que pueden mejorar el comercio bilateral.
En otra parte de sus declaraciones, May hizo una alusión al fallido golpe militar en Turquía y la polémica situación de los derechos humanos bajo la presidencia de Erdogan.
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