El procurador general del estado de Nueva York, Eric Schneiderman, consideró hoy ilegal la propuesta del presidente Donald Trump de suspender fondos federales a las llamadas “ciudades santuario” que protegen a inmigrantes sin documentos.

Luego de la orden ejecutiva firmada por Trump, Schneiderman dijo que el presidente “carece de la autoridad constitucional para cortar el financiamiento a los estados y ciudades simplemente porque han actuado legalmente para proteger a las familias de inmigrantes”.

La opinión de Schneiderman coincide con la guía que su oficina emitió la semana pasada para que las ciudades del estado pudieran defender legalmente a su población migrante de las acciones que pudiera emprender el gobierno federal.

“Los gobiernos locales que tratan de proteger a sus comunidades de inmigrantes de los excesos federales tienen todo el derecho de hacerlo”, expresó el procurador.

La orden ejecutiva de Trump establece que el gobierno federal cancelará fondos a ciudades que se nieguen a cooperar con las autoridades federales cuando éstas soliciten retener a un migrante indocumentado para deportarlo.

Al menos desde 2013, Nueva York y otras muchas ciudades se han negado a compartir información con autoridades migratorias federales sobre personas sin documentos y a retener a inmigrantes si la orden no proviene de un juez.

“Cualquier intento de intimidar a los gobiernos locales para que abandonen las políticas que han demostrado mantener nuestras ciudades seguras, no solo es inconstitucional, sino que amenaza la seguridad de nuestros ciudadanos”, manifestó Schneiderman.

Por ello, el procurador de Nueva York exhortó a Trump a revocar esta orden ejecutiva de inmediato, o de lo contrario su oficina hará “todo lo que esté a su alcance para combatirla”.

Por su parte, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, aseguró en una conferencia de prensa que tiene la confianza de contar con los argumentos legales para enfrentar en un juicio la orden ejecutiva de Trump.

“No vamos a deportar a los neoyorquinos respetuosos de la ley. No separaremos a las familias. No dejaremos a los niños sin sus padres”, afirmó De Blasio.