La policía de Victoria, Australia, anunció que frustró un atentado programado para llevarse a cabo el día de Navidad.
Hubo siete arrestos en relación con este hecho, pero sólo cinco personas permanecen en custodia de las autoridades. Entre los arrestados hay un detenido egipcio y los otros cuatro sospechosos tienen ascendencia libanesa.
Los detenidos habían estado bajo vigilancia policial durante un periodo de tiempo previo a su arresto.
De acuerdo con las autoridades, los posibles objetivos para el “asesinato en masa” planificado eran la plaza de la Federación, la estación de trenes San Flinders o la catedral de San Pablo.
La policía aseguró que la amenaza ha sido “contenida” y el ataque “neutralizado”.
El alcalde de Victoria, Daniel Andrews, calificó el atentado frustrado como un “acto de maldad” y pidió al público seguir con sus planes normales para las fiestas de fin de año.
“No debemos perder de vista que mucha gente ha venido desde muchas partes del mundo para construir una nueva vida aquí, para trabajar duro y enfocarse en su familia y la prosperidad de este estado”, expresó.
“Los actos de sólo unos pocos, actos de maldad, no son actos de observancia religiosa, no son actos de fe, son todo menos eso“, afirmó el gobernante.
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