Un niño de tres años que acompañaba a su abuela de compras murió el sábado en Arkansas durante un tiroteo ocurrido cuando un conductor disparó contra el vehículo en el que viajaban, esto al considerar que no se movían "lo suficientemente rápido en una señal de alto", informó la policía.
El auto que manejaba la abuela con el niño en su interior estaba detenido en una señal de alto en el suroeste de Little Rock, cuando un conductor aparentemente molesto por la demora, se bajó de su vehículo y abrió fuego, informó la policía, con la fatalidad de que el menor recibió un impacto de bala.
La abuela resultó ilesa y se alejó conduciendo hacia un pequeño centro comercial al este de Little Rock desde donde llamó a la policía informando que su nieto había sido herido por arma de fuego. El menor fue trasladado al hospital infantil de Arkansas donde murió a consecuencia de sus heridas.
El menor, cuya identidad todavía no se ha revelado, es el segundo niño que muere por disparos en un incidente de violencia al volante en esta ciudad en las últimas semanas. Su muerte fue además el homicidio 40 en lo que va de año, indicaron las autoridades.
El teniente de policía Steve McClanahan informó que buscan un Chevrolet Impala de modelo antiguo y color negro, que conduce un hombre negro y alto, aunque no han dado una descripción completa del sospechoso pidieron ayuda al público para localizarlo.
El jefe del Departamento de Policía de Little Rock, Kenton Buckner, indicó en rueda de prensa el sábado por la noche que todavía no saben si el agresor supo que disparó al niño.
El mes pasado, una niña de dos años murió cuando un auto pasó junto al vehículo en el que ella viajaba y abrió fuego. No se ha capturado al agresor de ese caso.
Buckner dijo que los asesinatos por ataques de furia durante el manejo son frustrantes para la policía y la comunidad, especialmente porque las jóvenes víctimas eran "inocentes" y en una situación así "no hay mucho que puedan hacer para protegerse".
.gif)
