La llamada “ley de regularización” ha sido aprobada por un comité ministerial el pasado domingo y aún tiene que ser sometida al aval del Parlamento para entrar en vigor.

La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, señaló en un comunicado que, de implementarse, esta sería la primera legislación territorial adoptada por el gobierno israelí con respecto a Cisjordania, una región fuera de su jurisdicción.

En la práctica, la iniciativa resultaría en la confiscación de los derechos de propiedad de ciudadanos palestinos para el uso de los colonos isarelíes, lo que consiste en una violación de las leyes israelíes e internacionales, advirtió Mogherini.

La Alta Representante recordó que los asentamientos judíos “son ilegales bajo la legislación internacional, constituyen un obstáculo a la paz y amenazan con tornar imposible la solución de dos Estados, la UE reitera su fuerte oposición”.

En ese contexto, “la UE reitera su fuerte oposición a la política de asentamientos israelí y a todas las acciones tomadas en ese sentido”.