Al ver Coco nos queda claro que Pixar se inspiró en mexicanos comunes y corrientes. No es de sorprender que la abuela, tía, mamá o papá de Miguel nos recuerden a alguien que conocemos. Pero, ¿qué tal si te recuerdan a ciertos dibujos que viste por horas en la primaria?
Los mexicanos más ociosos del Internet escarbaron entre sus memorias los famosos libros de la SEP, aquellos libros gratuitos con los que todos crecimos.
¿Se acuerdan de Paco el Chato? Aquel niño con historias y temas educativos en varios libros de la SEP, pues hay cierta similitud entre Paco el Chato y Coco.
En realidad, toda similitud acaba si salimos de esta imagen y de la importancia de la abuela en la cultura mexicana. Paco el Chato ha evolucionado con el tiempo. Rediseñado y con móvil en mano, sigue enseñando a los niños en la web.
Esto es una prueba más de lo fiel que es Coco a las costumbres y estereotipos mexicanos.