¿Cómo hablar con tus amigos de dinero?

El tema de dinero suele ser un gran tabú, aunque uno no tan reconocido. Sí, todas amamos ganar dinero, gastarlo, ahorrar... pero cuando se trata de involucrar a otras personas, suele volverse un tema complejo, delicado y nada sutil. Y si bien hay tips para hablar de dinero con tu pareja... lo cierto es que el tema puede llegar con tu familia, e incluso con tus amigos. Por ejemplo, compartir una renta, invertir en un negocio...¡hay posibilidades infinitas! ¿Pero hay una manera correcta de hablar de dinero con tus amigos? La hay, de tal manera que todos esos años de amistad no se vean afectados. Te decimos cómo manejarlo.

La primera regla: sean transparentes

En temas de dinero, lo más importante siempre será ser honestos, genuinos y 100% transparentes. Cualquier problema o crisis que intentes ocultar puede tener efectos tremendamente negativos, por lo que lo mejor será que desde un principio, así como pueden hablar de las cosas buenas, también contemplen los problemas y las reglas que van a mantener para que la amistad quede intacta. Puede que les cueste más trabajo (especialmente si dividen gastos por porcentaje, por ejemplo), pero este tipo de esfuerzos son, justamente, los que demuestran que ambas personas en la amistad (o si son más, con mayor razón cuidar todo) tienen como prioridad la relación y desean que todo marche.

No asuman cosas

Ok, conoces a tu amiga desde hace millones de años... pero eso no significa que puedas hacer algo pensando que ella no se va a quejar. En cuestiones de dinero, todos tienen el derecho (y la obligación, BTW) de estar bien enteradas de todos, y eso incluye movimientos, inversiones, préstamos y ahorros. Y te ponemos un ejemplo básico: si uno de tus roommies toma algo del refrigerador que es tuyo, quizás no te moleste, pero al final hablamos de tus cosas, y como tal, se deben respetar, o al menos preguntarte, ¿cierto? Es el mismo principio básico del dinero: avisar, preguntar, platicar y concluir entre todos los involucrados. ¡NO sorpresas!

Ayúdense mutuamente... ¡o pidan apoyo con un profesional!

Por alguna razón, le tenemos tanto miedo al tema del dinero, que pocas veces nos educamos a profundidad sobre él. Pensamos que la cosa sólo queda en trabajar y ganar dinero... pero poco leemos de inversiones, ahorros, fondos, seguros... ¡hay muchas posibilidades! Traten de instruirse en el tema, y si de plano creen que no es lo suyo, ¡para eso pueden ayudarse de un experto! El punto es que encuentren nuevos caminos para sus finanzas y puedan cumplir metas como rentar un nuevo depa, algún viaje o ahorrar para el futuro.

Tengan cuidado con el préstamo de dinero

Seguro has escuchado esta frase "cuentas claras, amistades largas" y comúnmente, uno de los temas MÁS sensibles, es el préstamo de dinero. A diferencia de la pareja, donde ambos comparten los ahorros y no es tanto un préstamo sino un gasto a contemplar, en las amistades los préstamos pueden ser un tema frágil, porque está la posibilidad de que ese dinero no regrese y que te sientas "traicionada" o considerar que esa amistad es muy irresponsable. Hay que ser consciente de algo: o de plano dices que no puedes prestar ese dinero... o más que préstamos, lo haces como un regalo. Es una manera sana de cambiar la perspectiva, pero ponerle la etiqueta de préstamo, puede hacer que la amistad se vea vulnerada. Nuevamente, recordemos la regla uno: sé honesta. O dices "no tengo" o decides darlo sin esperarlo de vuelta, siempre tratando de que no te afecte a ti. Sabemos que suena raro... pero es una manera de color la amistad como una prioridad, y sabemos que el dinero puede ser un tema muy sensible.

Motívense a ahorrar

Como mejores amigas o amigos, las salidas, bailes, drinks y restaurantes están a la orden del día... pero en la amistad, también debe existir la motivación del ahorro. Entre sus gastos, pueden contemplar las salidas, pero no olviden dejarse algunos recordatorios para que tengan una sana economía. Ahorrar, mandar todo a otra cuenta... lo que les acomode mejor, pero ver el dinero de una manera sana y no como un despilfarro, puede ser una buena motivación en la dinámica de amistad.