La Gran Tristeza De Mi País: entre El Odio y El Miedo

Adiós cuídate… instantes después de haberle dicho estas palabras a una colega periodista, retumbaron en mi cerebro como nunca antes lo habían hecho,  porque dejaron de ser simples palabras de despedida a convertirse en verdaderas recomendaciones para aquellos quienes nos rodean, para aquellos a quienes queremos, a quienes amamos y que si tenemos miedo de no volverlos a ver.

Y ese es ahora el peor escenario al cual debemos enfrentarnos al entender que ya hemos perdido  la calma casi inmediatamente después de haber perdido la tranquilidad, y la frágil seguridad que desde hace un tiempo a la fecha también se ha ido desvaneciendo.

Las líneas a continuación desearía no haber tenido que retomarlas como un tema de las siguientes líneas querido lector, tan presente, tan triste, tan alarmante y sin duda que nos causa zozobra como sociedad: el infame asesinato, el feminicidio.

Las cifras que registra el Secretariado Ejecutivo advierten que en el primer cuatrimestre del 2019, murieron 1,199 víctimas de la violencia machista. Es decir, cada dos horas y media en promedio, una mujer es asesinada por el hecho de ser mujer, una estadística que no disminuye a pesar de la gran movilización social.

Aquí la reflexión que quiero permitirme hacer es que difícilmente podríamos llegar a establecer soluciones integrales mientras sigamos pensando que la violencia tiene género, pues si bien es cierto que los hombres la han ejercido de manera histórica en contra de la mujer, la mujer no es incapaz de ejercer la violencia en contra de sus semejantes pues ese  seria un argumento faláz.

En abril, las autoridades mexicanas contabilizaron 315 homicidios, convirtiéndose así en el mes con más delitos contra la mujer en lo que va del 2019. Le sigue marzo, con 310; enero con 302 y finalmente  febrero con 272 asesinatos con dolo. 

En un contexto más general, las víctimas mortales aumentaron 97 por ciento en cuatro años. En los primeros cuatro meses de 2015 se registraron 610 crímenes; en 2016 fueron 847; en 2017 967 y en 2018, 1,142.

El primer cuatrimestre de 2019, también fue el más "sangriento" para niñas y adolescentes, ya que se reportó que de enero a abril 114 menores de cero a 17 años, fueron asesinadas. 

Si a esto sumamos lo que ha estado ocurriendo en términos de nuestra cotidianeidad y cercanía con quienes nos rodean, el problema ahora es que la violencia que ha generado el problema más grave que es la impunidad, están llevando a un número importante de mujeres a la calle, que la van agarrar contra mí, por hacer periodismo siendo hombre en un espacio de mujeres manifestandose en donde yo no debo estar. La pregunta es si esto soluciona algo y si la confrontación también lo haría.

En el país, 10 estados concentran más de 65 por ciento de los 1,199 asesinatos en mujeres ocurridos a inicio de año. A la cabeza se encuentra la entidad mexiquense con 152 víctimas de feminicidio y homicidio doloso; Continúa Jalisco, con 102, Guanajuato con 99; Veracruz con 73; Chihuahua con 71 y finalmente la Ciudad de México con 70. 

La mayoría de las mujeres casadas o con novio han sufrido algún tipo de violencia machista, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística 2018. Es decir, más de 12 millones de mujeres soportan el terror al interior de sus casas, y en la intimidad de su relación. Pero, una de las cifras más alarmantes es que alrededor de 8,000,000 han sido asfixiadas, cortadas, quemadas, y han reconocido padecer depresión.

Y la parte que sigue es ahora la que estamos viendo en una sociedad cada vez más dividida, en amigos que han dejado de serlo, en familia que ha dejado de estar, en políticos que sin duda aprovecharan el rio revuelto, en usted y yo si haremos algo al respecto.

HASTA LA PROXIMA.