Mientras Petróleos Mexicanos (Pemex) lucha por revertir su producción en declive, al tiempo que carga con la deuda financiera más grande del mundo entre petroleras, el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STRPM) dirigido por Carlos Romero Deschamps logró elevar los beneficios para sus agremiados.
“El concepto de productividad para los trabajadores se logra incrementar a 30.85% del salario ordinario”, detalla el Contrato de Trabajo Colectivo 2019-2021 vigente desde el pasado 1 de agosto, al que tuvo acceso Forbes México.
La negociación ocurre con Pemex enfrentando una deuda de 104,400 millones de dólares (mdd), mientras su producción petrolera ha caído a 1.6 millones de barriles diarios desde un máximo histórico de 3.4 millones en 2004. Además, las reservas petroleras probadas del país cayeron 7 por ciento en el último año, esto quiere decir que a México solo le quedan 8.5 años de hidrocarburos.
La canasta básica de alimentos de los trabajadores sindicalizados subió de 3,756 a 4,943 pesos mensuales. “Con esto se beneficia la economía de trabajadores, jubilados y pensionados”, detalló el documento.
El monto del seguro de vida del jubilado pasó de 79,104 a 82,762 pesos.
La atención dental se incrementó de 2,061 pesos a 2,157 pesos. El incentivo a la salud se aumento de 5,300 a 5,545 pesos a trabajadores de planta y transitorios que mantengan un índice de masa corporal.
En caso de que el trabajador fallezca, se incluye el pago a exparejas del trabajado, pues antes solo se consideraban conyugue y los hijos.
El sindicato dijo que los uniformes deportivos deben ser de “primera calidad”.
El sindicato señaló que se mantiene la prestación del pago de gas doméstico, gasolina y aceite lubricante “para tranquilidad de los trabajadores, por lo que representa para su economía”.
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