Miguel Angel Guerrero | 31/07/2019 | 00:00
De haber cumplido su anuncio la senadora potosina del PVEM Leonor Noyola Cervantes de denunciar ante el senado de la república los negativos impactos ambientales causados por la canadiense Minera San Xavier con sus operaciones extractivas en los municipios de Cerro de San Pedro, además de la apropiación irregular de más de 80 hectáreas de terreno pertenecientes al ayuntamiento de Soledad de Graciano Sánchez dependencias federales como Semarnat y PROFEPA y demás involucradas en el tema cuentan con los elementos necesarios para proceder contra esa firma extranjera sempiternamente protegida por el gobierno federal antes de que suspenda actividades definitivamente y se vaya como las chachas sin remediar como lo marcan las normas los daños ecológicos ocasionados a las tierras y fundamentalmente a los mantos acuíferos luego de más de un década de utilizar decenas de toneladas diariamente de cianuro y arsénico en el beneficio de los minerales.
Por eso, insistimos, en caso de que doña Leonora Noyola haya denunciado en pleno senado los estropicios ambientales provocados en la zona por la MSX las autoridades federales no tienen pretexto para no
proceder en su contra y aplicar las enérgicas sanciones que merecen los graves daños causados con sus operaciones cuyas consecuencias, según los expertos podrían llegar al envenenamiento de los mantos de agua de los que se abastece el área de la capital.
De lograr que su denuncia tenga eco en los niveles correspondientes la senadora demostraría mayor efectividad que las quejas y señalamientos de los grupos ambientalistas que por años han exigido castigo a la minera y aún que la embajada de Canadá en México ante la que se entregó hace varios años, un pliego petitorio en demanda de que la empresa remediara el rumbo y que, de ser posible, cancelara sus actividades extractivas de oro y plata lo que no pasó de una mediana cobertura mediática del episodio sin mayor trascendencia.
Y del hecho de que la canadiense siempre ha gozado de la protección del gobierno federal para operar y contaminar impunemente lo refleja el incidente protagonizado en una visita presidencial de Vicente Fox cuando regañó públicamente al alcalde de Cerro de San Pedro por no entregar con prontitud el permiso de uso de suelo a la minera.
Así entonces, si la senadora cumplió con la denuncia ante el senado tiene para ganarse el reconocimiento
generalizado de los potosinos, pero, si, por el contrario, no pudo o no quiso hacerlo proyectará la impresión de que utilizó un tema delicado y sensible para la gente de SLP para atraer la atención de los medios de comunicación a falta de acciones legislativas valiosas que pueda esgrimir con ese fin, lo cual se pondrá en claro a partir de este día cuando se conozcan las actividades desarrolladas ayer miércoles en la cámara senatorial.