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La 8ª generación del Nissan Maxima, un prometedor modelo que se estrena para quedarse

Agencia | 22/07/2019 | 13:14

El ahora nicho de los sedanes grandes de volumen (no premium) está pronto a extinguirse en pro de la evolución a favor de los SUV.
 
Ni siquiera queremos hablar del tema porque nos ponemos sentimentales, pero Nissan se rehúsa a abandonar a su modelo más representativo, y lo actualiza para intentar mantenerlo vivo por más tiempo.
 
Nueva parrilla en V, faros y calaveras LED, nuevo diseño de rines y más equipamiento acercan al Nissan Maxima al segmento premium.
 
Pero no todo es imagen, también incorpora tecnologías Nissan Intelligent Mobility a través del Safety Shield 360, que monitorea todo lo que sucede alrededor del auto para evitar accidentes, incluyendo frenado de emergencia con detección de peatones, alerta de punto ciego, alerta de tráfico cruzado, alerta de desvío de carril, asistencia de luces altas y de frenado trasero automático, todos disponibles en la versión Exclusive.
 
Por dentro, el cuadro de instrumentos, los paneles en las puertas, insertos del volante, las costuras, materiales de los asientos y las rejillas de las bocinas, han sido renovadas, proporcionando un aspecto de mayor calidad.
 
Al volante no ha cambiado nada, las mismas sensaciones de manejo con una envidiable calidad de marcha digna de una marca premium.
 
Mucho de esto es producto del mismo V6 de 3.5 l y 300 hp de los últimos años. Acelera súper bien, y si se lleva con calma es capaz de ser ahorrador.
 
Dos modos de manejo y una transmisión automática CVT nunca entregan verdaderas sensaciones de deportividad, pero sí de comodidad y suavidad, con un toque de contundencia si pisamos el acelerador a fondo.
 
Precisión al volante y frenos a la altura de su tamaño y peso, nos dan la confianza de circular por encima de los 160 km/h constantemente y sin mayor presión.
 
Es una gran actualización por parte de Nissan, ojalá esto no sea el último ejercicio de la marca en un segmento que está desapareciendo, pues sedanes grandes sólo quedan éste y el Chrysler 300 (al menos en México), aunque hay quienes les gusta ver en el Stinger GT un tercer rival. Larga vida a los sedanes.