México no será realidad creando una sociedad de clientes electorales

Qué cosa tan rara somos los humanos... Nacer no pedimos, vivir no sabemos, pero morir no queremos.

Frase popularizada por Facundo Cabral.

LA LUCHA POR COMBATIR LA impunidad y lo que resulta de esta, el crecimiento de la corrupción, aún le queda largo trecho qué andar en nuestro país, pero igualmente en el mundo. El humano parece que quiere y no, terminar con nuestras dolencias sociales.

YA NO ESTÁ LEJOS NADA. LO QUE sucede en alguna parte de la Tierra, pronto se sabe y es del dominio público. Las noticias de todos los días, creo, han terminado con nuestra capacidad de asombro. Muchas personas lo comentaron, muchas personas lo advirtieron. Hoy es realidad. De verdad sin quererlo, nos sucede.

NOS QUEJAMOS CADA DÍA DE LA inseguridad, de la corrupción, de la pobreza, de las confrontaciones y muertes violentas. Habría que ver qué hacemos cada quien por mejorar y no comportarnos como no quisiéramos que los demás se comportara con los propios.

TANTAS Y TANTAS ADVERSIDADES que se nos hacen y vemos cada día. El ser humano se devasta entre nosotros mismos, con escenarios como si tratáramos de exterminarnos entre los humanos. No existe otro ejemplar en la creación que trate de acabar con su misma especie en formas tan letales como lo hacemos hombres y mujeres.

MÉXICO, NUESTRO PAÍS, CON SU gente guerrera, deberíamos estar en pie de lucha, unidos, creando y generando mejores formas de vida; las que sean envidiables para otros países. En lo general nos hemos convertido en los detractores de unos con otros por causas equivocadas. Nos han hecho pelear y polarizarnos sin razones cívicamente valederas.

UNA SOCIEDAD PROGRESISTA necesita de todos, pero viendo en el mismo lado del progreso siempre, y no sólo en la desgracia, cuando regularmente el temor y el miedo nos iguala para trabajar juntos.

POR AHORA LOS TEMAS SOCIALES se mezclan con los económicos y lo que debería ser una vecindad doméstica sana en razón del progreso, se torna turbia e insultante con políticas alejadas de la justicia social. México se ve debilitado ante las hegemonías mundiales y somos los propios mexicanos quienes permitimos nuestra debilidad, peleando por otros y persiguiendo envidias y odios.

¿CUÁNTO HEMOS ACARICIADO EL sueño de ser un México del primer mundo? La respuesta debería de ser 'muchos años', pero la construcción de nuestro país, se reinventa cada sexenio en forma equivocada, retrasándonos. No son los políticos quienes ha construido este México que vivimos, ha sido la sociedad, somos todos.

LO MEJOR DE ESTE GRAN PAÍS NO lo tienen quienes administran los poderes de la Nación, somos la sociedad que lo ha construido.

¿CUÁNDO SEREMOS EL PAÍS QUE deseamos? Igualmente la respuesta está en nosotros. No podemos desear sólo progreso y beneficios para una individualidad egoísta, pero también, no se puede querer sólo mejorar sin trabajar por ello.

LA ESCLAVITUD DE LA POBREZA NO es provocada por quienes trabajamos, todo lo contrario, queriendo dejar ejemplo del esfuerzo, es que se avanza. Construir sólo con unos cuantos y que de ello vivan los demás, no habla de una sociedad tendiente a lo igualitario, habla de ciudadanos de primera y de segunda.

LA CUARTA TRANSFORMACIÓN DE nuestra República jamás podrá ser queriendo reinventarla a costa de nuestra patria, olvidando el esfuerzo de los mexicanos que históricamente han construido México, pero igualmente jamás será realidad regalando lo que no le pertenece a nadie, pero sí a todos, creando una sociedad de clientes electorales en el lugar de una sociedad de trabajo y unidades.

@jaimechalita