Viernes 29 de Marzo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Bulgaria: sus ciudades más asombrosas

Agencia | 19/04/2019 | 11:45

Por su privilegiada ubicación al noreste de la península de los Balcanes, Bulgaria ha simbolizado el cruce de caminos de culturas provenientes del Mediterráneo y el Medio Oriente. Así lo demuestran los vestigios de tracios, griegos, romanos, bizantinos, otomanos y turcos.

 

Programar un viaje de siete a 10 días te permitirá descubrir la riqueza de este destino que, afortunadamente, no se ha masificado.

 

Lo recomendable es iniciar en Sofía, la capital, para conocer algunos de sus atractivos. Visita la Catedral de San Alejandro Nevski, la Mezquita Banya Bashi, el Museo Arqueológico Nacional, la Sinagoga de Sofía y el Parque Borisova Gradina para pasear por la tarde.

 

Reserva un tour guiado hacia la Iglesia de Boyana y el Monasterio de Rila, sitios emblemáticos que son Patrimonio Mundial.

 

Nombrada Capital Europea de la Cultura 2019, Plovdiv requiere, por lo menos, un día para recorrerla. En la pintoresca ciudad antigua, el Teatro Romano, la Casa Balabanov, la Mezquita Dzhumaya, la Iglesia de San Constantino y Santa Elena son visitas obligadas.

 

Otra parada que debes considerar es Kazanlak. La llaman "ciudad de las rosas" al producir más del 70% de la esencia de esta flor empleada, sobre todo, en perfumería.

 

Es también la puerta de entrada hacia el legado tracio y donde resultan imperdibles la Tumba Tracia, un impresionante mausoleo, ahora declarado Patrimonio de la Humanidad que formaba parte de una gran necrópolis, así como los vestigios arqueológicos del Valle de los Reyes Tracios.  

 

A poco más de hora y media hacia el norte de Kazanlak, llegarás a Veliko Tarnovo. Localizada a orillas del río Yantra, esta señorial ciudad fue durante la Edad Media la capital del Imperio Búlgaro y uno de los bastiones defensivos más importantes en la época de la ocupación otomana. Además de bonitas iglesias ortodoxas, sobresalen la majestuosa Fortaleza de los Tsarevets y Samovodska Charsia, o el Gran Bazar, un encantador mercado medieval al aire libre y el lugar ideal para comprar artesanías locales o probar platillos típicos.

 

Varna, a unos 220 kilómetros al noreste de Veliko Tarnovo, puede ser el cierre perfecto de tu viaje. Conocida como la Perla del mar Negro, es de los spots preferidos por turistas que buscan buen ambiente de sol y playa, relajantes experiencias de spa y tranquilos paseos por pequeñas localidades costeras.

 

Si vas en temporada invernal y te gusta esquiar, entonces lo aconsejable es que te dirijas al sur del país, al Parque Nacional de Pirin, donde Bansko y Borovets son dos de las estaciones de esquí más populares y atractivas con buenas opciones de hoteles, restaurantes y entretenimiento.