Los jueces torcidos

EN NUESTRO QUERIDO MÉXICO existen dos cosas que espantosas: la corrupción y la impunidad. La primera no podrá combatirse mientras la segunda exista.

EL DÍA DE AYER EN SU conferencia madrugadora, el primer mandatario de la nación, Andrés Manuel López Obrador, se quejaba de que los jueces son grandes culpables de que muchos delincuentes queden impunes. Amenazó con estar difundiendo sus nombres cuando los casos fueran más que evidentes. Esta misma desesperación la hizo pública, en su momento, Felipe Calderón.

Y CLARO QUE GENERA CORAJE E impotencia que los elementos policiales hagan su trabajo y expongan su vida, los ministerios públicos dediquen horas y horas para armar una investigación, y que luego por jueces corruptos los delincuentes salgan riéndose de todos.

CLARO ESTÁ QUE EXISTEN muchas veces “errores intencionales” de las fiscalías para el acusado salga sin raspones, y si está ligado con la política está asegurada la impunidad.

AHÍ AL JUEZ SE LA PONEN DE pechito y se lava las manos fácilmente. Pero existen otros casos donde es claro cómo los jueces aprovechan el más mínimo detalle legaloide para soltar a los delincuentes.

CONOZCO UN CASO DONDE LA Secretaría de Seguridad Pública en un lapso de dos meses detuvo a un tipo cuatro veces cometiendo delitos y éste salía de la cárcel como Pedro por su casa.

ESTE TIPO DE ACTOS TAMBIÉN provocan más inseguridad y daño a la sociedad, porque es una invitación a seguir delinquiendo para estos malhechores.

PEGASUS

Como sucede siempre que se acaba una administración, se está confirmando que muchos activistas y periodistas del país fueron o fuimos espiados por el Gobierno Federal por medio de “Pegassus”.

POR CIERTO LA EMPRESA QUE vendió este sofisticado equipo tenía su dirección fiscal en la calle de Pedro Moreno aquí en la capital potosina. Una empresa fantasma que le dejó mucho dinero a un alto funcionario federal y que se sospecha fue Jesús Murillo Karam, ex procurador.

AQUÍ LA FISCALÍA TAMBIÉN TIENE dos equipos de espionaje.