Los coleccionistas extranjeros colaboran en la pérdida de la biodiversidad de San Luis Potosí. Cada vez son más los turistas asiáticos, europeos y estadounidenses que llegan al territorio local buscando especies endémicas para su colección personal.
De acuerdo a la NOM 059 SEMARNAT, una especie es aquella cuyo ámbito de distribución natural se encuentra circunscrito únicamente al Territorio Nacional, la norma oficial de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), informó que hay más de 300 plantas que están en riesgo de extinguirse, a nivel nacional.
Son 2 las especies que están en mayor riesgo
Francisco Sánchez Barra, responsable del Jardín Botánico “El Izotal”, de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, señaló que la Pelecyphora aselliformis y la Turbinicarpus graminispinus, son las dos especies que corren mayor riesgo.
El botánico dijo que en Guadalcázar se ha detectado un lugar donde estas especies son comercializadas entre los extranjeros, por los mismos habitantes del municipio.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) no ha logrado controlar el tráfico de lo que entra y sale del país, reconoció el experto que además recalcó que esas especies son más útiles aquí, ayudando al ciclo hidrológico potosino (para el cual están adaptadas), que formando parte de la decoración de algún extranjero.
Lugareños venden especies endémicas a extranjeros
El consultor ambiental Carlos Álvarez, señaló que la comercialización con extranjeros solo constituye el 30 por ciento del problema, ya que de acuerdo a su percepción, el factor que en su mayoría ocasiona la extinción de las especies endémicas, es la falta de regulación de las industrias.
Explicó que el factor que ocupa el 40 por ciento de los riesgos, obedece a la contaminación química, algo en lo que el gobierno de México “nunca ha querido invertir”.
Se las están llevando desde hace 60 años
“Seguramente sí existe un tráfico ilegal de especies en peligro de extinción, porque México no tiene un control sobre sus fronteras ni para adentro ni para afuera, no tenemos un control real, estricto, que pudiera detener e inhibir ese tráfico ilegal de especies, desde hace 60 años se han estado llevando especies de aquí”.
Las sustancias químicas, los compuestos orgánicos persistentes y los residuos peligrosos sujetos a convenios internacionales, son los tres factores determinantes en la mala gestión de las sustancias químicas.
Carlos Álvarez señaló que ahora es cuando las especies nacionales corren un mayor riesgo, pues la Profepa, Semarnat y Conagua sufrieron un recorte a sus presupuestos operativos.
“Esta reducción, en mi percepción, constituye el otro 30 por ciento del problema de la extinción de especies en México y San Luis Potosí”, finalizó.
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