Un riesgo, dar visas humanitarias a migrantes

San Luis Potosí, SLP.- Enrique Malacara Martínez, titular del Instituto de Migración y Enlace Internacional (IMEI) del Gobierno del Estado, advirtió que la entrega de visas humanitarias a los migrantes centroamericanos podría ser una decisión riesgosa.  

 “Hoy el Gobierno Federal tomó una decisión arriesgada, compleja y a veces hasta difícil de entender por parte de los estados; otorgar visas o tarjetas humanitarias para que transiten por todo el país, los integrantes específicamente de esta caravana, todos y cada uno de ellos contaban con esta tarjeta que les permite transitar por cuestiones humanitarias un año por todo el país, les permite inclusive viajar en un autobús o incluso tomar un vuelo de San Luis a Tijuana, por ejemplo”.

Malacara expuso que el objetivo de la mayoría de migrantes es llegar a la frontera, por lo que es probable que allá sí se viva una sobresaturación.

 “Nos hemos enterado por nuestros compañeros de Baja California, de Chihuahua, del propio Coahuila, no se diga de Tamaulipas, que están en crisis fronteriza de migrantes, porque están llegando migrantes centroamericanos a intentar solicitar refugio o asilo en los Estados Unidos, pero además están deportando a mexicanos y esa es una situación muy normal que hace Estados Unidos, que los deportan, potosinos que deportan, entonces se están dando estas crisis fronterizas”, sostuvo.

El Instituto Nacional de Migración (INM), concluyó el 28 de enero, la primera etapa del Programa Emergente de emisión de Tarjetas de Visitante por Razones Humanitarias, hasta el 11 de febrero se entregaron las últimas 13 mil 270 tarjetas. 

El paso de las caravanas migrantes por San Luis Potosí es un fenómeno social cada vez más frecuente. En los últimos cuatro meses, tres grupos de centroamericanos han pasado por la capital potosina en busca de apoyo y refugio para continuar su paso y llegar al “oasis americano”.

El domingo 17 de febrero, llegó una caravana de 461 migrantes a la ciudad, el 90% provenía de Honduras, el 8% de El Salvador y el resto venía de Guatemala. Algunos llegaron enfermos de las vías respiratorias, infecciones estomacales e incluso con quemaduras por caminar descalzos. 

El grupo de personas arribó tras un largo camino desde la frontera sur de México huyendo por la crisis humanitaria que se viven en sus países.

Rolando Maldonado Salas, director de Cáritas Diocesanas y la Casa del Migrante en San Luis Potosí, informó que esta última caravana partió la mañana del martes 19 de febrero, con destino a Monterrey Nuevo León, para continuar su travesía hasta la frontera norte con Estados Unidos.

Cada vez pasa menos tiempo entre el paso de una caravana y otra. Apenas hace tres semanas llegó una caravana de 2 mil migrantes, la mayoría eran hombres de entre los veinte y treinta años de edad.

La crisis de Centroamérica, se está reflejando de una manera cada vez más latente en los estados mexicanos, autoridades temen que a largo plazo, no haya los suficientes insumos para atender a las caravana.

Maldonado Salas, reconoció que cada caravana se comporta de manera distinta, por ejemplo, la columna de dos mil personas que llegó hace apenas unas semanas, no traía ningún documento y venían de manera irregular.

 “Cada caravana, cada grupo, cada movimiento, trae sus propias necesidades, sus propias carencias, el fenómeno migratorio es tan cambiante, cada caravana se caracteriza por algo muy particular, son muchos los factores que pueden provocar, alterar y cambiar las necesidades de cada una de ellas”.

El también sacerdote, ejemplificó que la mayoría de los integrantes de la última caravana,  venía con documentación en orden, la cual los dota de derechos, para tener un paso totalmente libre por el país.