Plano Informativo | 29/01/2019 | 01:10
Una fuga de agua que no ha sido atendida ha convertido un tramo del bulevar Río Santiago en un peligro para los automovilistas, como lo demuestra el elevado número de accidentes que se han registrado en las últimas semanas.
El tramo comprendido entre el Puente Naranja y el Ángel de la Independencia, está cubierto por lama debido a la humedad que junto con la velocidad a la que se conduce en el circuito interior del bulevar, se ha convertido en un problema que cada día está más cerca de provocar una tragedia.
En las últimas dos semanas el número de accidentes en esta zona se ha disparado, ocasionando lesiones a los automovilistas y cuantiosos daños a los vehículos, que en algunos casos llega a ser pérdida total.
Las probabilidades de que ocurra un accidente serio se elevan durante la noche ya que además de las malas condiciones de la carpeta asfáltica y la humedad, la falta de alumbrado que impide ver las irregularidades del camino convierten la zona en una trampa perfecta para la tragedia.
Soledenses toman medida preventivas
Una parte del bulevar está bajo la jurisdicción del municipio de Soledad de Graciano Sánchez, que está tomando precauciones para tratar de minimizar los riesgos, alertando a los usuarios del Río Santiago.
Por esta razón la Dirección General de Seguridad Pública de Soledad recomienda a los conductores que eviten circular a velocidades inmoderadas sobre el circuito interior del Río Santiago, pues no es considerada una vía rápida.
El subdirector de la corporación municipal soledense, Jorge Ramírez Leyva, consideró positivo implementar una serie de medidas preventivas a causa de los constantes hechos de tránsito que se registran en el tramo comprendido entre el Puente 20 de Noviembre y el Acceso Norte.
Explicó que las tareas de mantenimiento de esta vialidad corren a cargo de la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obra Pública (Seduvop), y en el caso particular de "El Ángel de la Independencia”, en el carril con dirección al puente de San Felipe, se registran encharcamientos por otra fuga que también ha generado lama y que por consiguiente hace que el pavimento se vuelva resbaladizo.
Ramírez Leyva consideró viable que en los puntos de mayor riesgo se instalen boyas reductoras de velocidad para la prevención de accidentes.
Señaló que desde la dependencia a su cargo se recomienda a los conductores que circulen a una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora y que lo hagan con mucha precaución, además de salir con suficiente tiempo de anticipación rumbo a sus destinos. Se hace particular énfasis en el exhorto a que usen el cinturón de seguridad tanto conductor como pasajeros así como a evitar el uso del teléfono celular tanto para llamadas como para mensajes de texto, ya que esto incrementa exponencialmente el riesgo de tener un accidente vehicular.
Finamente explicó que en varias ocasiones se ha solicitado la intervención de la Seduvop para que atienda la fuga que ha propiciado accidentes en gran parte por el piso de rodamiento resbaladizo.