Las comunidades aledañas a los ductos de Pemex en Tlahuelilpan, además de recibir los programas de bienestar del gobierno federal, también contarán con “apoyo humanitario” para inhibirlos de participar en el robo de combustible.
Así lo aseguró Diana Álvarez Maury, subsecretaria de Desarrollo Democrático y Participación Social de la Secretaría de Gobernación, luego de un recorrido por el municipio, donde el viernes pasado explotó una toma clandestina que dejó hasta el momento 91 muertos.
“Se va a desarrollar todo un apoyo humanitario a estas familias y que detectaremos una a una cuáles son las necesidades que ellos tienen y que tengan la posibilidad de nuevas oportunidades para que no vuelvan a ser víctimas de este tipo de situaciones", declaró.
“El apoyo humanitario sería al identificar cuáles son las necesidades de cada uno de ellos, alguien tiene un perfil más de campo u otras familias tiene algún tipo de negocio cómo puede ser venta de quesadillas, fondo o alguna necesidad personal, familiar”, detalló.
La funcionaria de la Secretaría de Gobernación consideró que existen “muchísimas cuestiones” que no necesariamente están dentro de un programa de bienestar social y que podrían ayudar a alejarlos de estas prácticas.
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