Viernes 15 de Noviembre de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

El huachicol y los daños colaterales

Pedro Cervantes Roque | 12/01/2019 | 15:01

DOS O TRES SEMANAS DE FALTA de abasto a las gasolineras de diez estados del país han generado una controversia entre sectores de población y gobierno porque éste no aplicó un criterio que persiga el mal menor a la población consumidora de combustibles y, si bien alega la disminución importante en los volúmenes de combustible robados, los terceros perjudicados resienten daños que imputan al gobierno.

 

EL GOBIERNO FEDERAL -DEBÍA escribir “el presidente Andrés Manuel López Obrador”- está atrapado desde el inicio de la medida adoptada sin mucho pensarle. No podía avisar de sus medidas porque es un hecho que la penetración de los principales “huachicoleros” llega a los centros de decisión más importantes. No encontró opción que tuviera el mal menor para los consumidores y ésta fue la razón de quedarse sin otro remedio que cerrar ductos en las zonas más destacadas por el robo de combustibles.

 

AHORA ES MUY DIFÍCIL IR CONTRA la corriente de condenas que por todos lados han surgido ante el pésimo resultado, por la incapacidad de surtir todas las gasolineras con oportunidad y suficiencia. Si uno se sorprende ante las versiones oficiales del robo de combustibles en México y el nivel de la pérdida que significa, más sorprendidos estamos de que el gobierno no haya pensado antes en detectar, capturar y consignar a quienes desde las estructuras administrativas y operativas de Pemex, tuvieron y tienen qué ver con el latrocinio, y luego perseguir, consignar y encarcelar a quienes desde fuera actuaron con el mismo propósito.

 

LA DIRIGENCIA EMPRESARIAL comenzó a protestar por la falta de estrategia, de logística y de aplicación de una medida que tiene el consenso a su favor en lo conceptual, pero no en lo primero. Los consumidores han sido objeto de todo tipo de suerte negativa. La desesperación de quedarse sin combustible en los vehículos destinados al trabajo, el riesgo de caer en manos de oferentes de combustible de origen y calidad desconocidos, y la inminencia de la pérdida en el trabajo o en el negocio, hizo que los consumidores cayeran en la especulación ante la ausencia de información clara y suficiente del gobierno.

 

NO OBSTANTE, LA TEMÁTICA HA ido explicándose paulatinamente. Las cantidades que se usan para tratar de calmar el enfado ciudadano, suenan escandalosas porque solo así lograrán revertir los efectos de una acción suficientemente acreditada como necesaria, pero erróneamente aplicada en la práctica.

 

ES VERDAD QUE LA GENTE VIVE inconforme con el nivel de corrupción existente en la empresa petrolera, pero también es verdad que las acciones gubernamentales no arrojan aún encarcelamientos de los responsables del robo de gasolina. Proteger el patrimonio de los mexicanos es tan importante como castigar a quienes lo han vulnerado. Evidentemente los consumidores somos los terceros perjudicados y nadie se explica cómo es que el gobierno federal no encontró mejor fórmula para lograr lo que obviamente todos aprobamos.

 

ANTE EL TEMOR DE UNA ESCASEZ generalizada, el consumo en San Luis Potosí permanece estable, a pesar de que consumidores de estados vecinos localizan el sitio más cercano para adquirir lo que por ahora no encuentran en las gasolineras de sus territorios.

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx