Con la pérdida de poder adquisitivo debido a la inflación, los compradores de vehículos más económicos como autos subcompactos ya no son sujetos de crédito y el financiamiento se está moviendo hacia segmentos más altos.
De enero a septiembre de este año, se financiaron 704 mil 061 vehículos nuevos, 7.5% menos respecto al mismo período de 2017.
Pero mientras el financiamiento de autos subcompactos disminuyó 7%, el de camionetas SUV se incrementó 3.5% y el de autos de lujo 7.3%, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Guido Vildozo, gerente para Latinoamérica de IHS Markit, explicó que la pérdida de poder adquisitivo ocasiona que los bancos opten por financiar a personas con un salario más alto y, por lo tanto, capaces de adquirir vehículos de mayor valor.
"Históricamente, en mercados en los cuales hay contracción en ventas a causa de las tasas de interés desaparece el consumidor, de entrada porque los bancos prefieren prestar a un cliente más establecido de salario más alto”, indicó.
Es por esto que pese a la caída en ventas de autos nuevos durante el año, las marcas de lujo siguen ofreciendo más variedad de modelos de lujo y SUVs.
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