El fallecimiento del expresidente de Estados Unidos, George H.W. Bush, a los 94 años, fue lamentado hoy por jefes de Estado y de gobierno, así como por figuras de la política internacional, quienes reconocieron su trabajo al frente de la nación más poderosa.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, afirmó que Bush tuvo un papel clave en el fin de la Guerra Fría que llevó la democracia a millones de personas en Europa, redujo la amenaza de guerra nuclear y fue un firme partidario del sistema internacional basado en normas y del estado de derecho.
En Australia, el primer ministro Scott Morrison destacó que la vida del expresidente fue de servicio y lo describió como “la personificación de los valores de Estados Unidos”, pues defendió lo que era correcto y luchó contra la tiranía y la opresión en cualquier forma.
John Howard, exprimer ministro australiano, subrayó por su parte que Bush, un verdadero amigo de Australia, asumió el cargo cuando se produjo el evento más trascendental en los asuntos posteriores a la Segunda Guerra Mundial: el colapso del imperio comunista de la Unión Soviética.
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, describió a Bush como un gran estadista, un verdadero amigo, cuyo espíritu de servicio público condujo a un final pacífico de la Guerra Fría que hizo del mundo un lugar más seguro para las nuevas generaciones.
A su vez, la reina Isabel II de Inglaterra aseguró que Bush fue un gran amigo y aliado de Reino Unido, también un patriota que sirvió a su país con honor y distinción, por lo que sus pensamientos y oraciones, al igual que los de su esposo, el príncipe Felipe, están con su familia y con el pueblo estadunidense.
El primer ministro canadiense Justin Trudeau se dijo entristecido por el deceso del expresidente, de quien resaltó su espíritu ejemplar de servicio y compromiso, su esfuerzo por fortalecer las relaciones entre ambos países, defendiendo el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte y recaudando fondos con fines benéficos.
Para el presidente francés Emmanuel Macron, H.W. Bush fue un líder mundial que apoyó firmemente la alianza con Europa, mientras que el líder ruso Vladimir Putin dijo que fue un hombre distinguido que sirvió a su país durante toda su vida, con un arma en sus manos durante la guerra y en un alto cargo en tiempo de paz.
A su vez, el expresidente soviético Mijail Gorbachev, agradeció la atención, amabilidad y sencillez de Bush, quien trabajó en una época de grandes cambios que exigían una gran responsabilidad y el resultado fue el final de la Guerra Fría y de la carrera armamentista.
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, declaró que Bush fue un líder que sirvió a Estados Unidos y apoyó al organismo mundial con dedicación, y destacó que “a lo largo de los años constantemente me impresionó su compasión, su instinto de moderación y su compromiso público”.
En Asia, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, destacó los grandes logros históricos del exlíder estadunidense, quien contribuyó a la paz y la estabilidad de la comunidad internacional.
El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, alabó la dedicación de Bush por la paz y la seguridad mundial, pues dirigió esfuerzos que pusieron fin a la Guerra Fría, favoreció la reconciliación entre Oriente y Occidente, por lograr la paz en la península de Corea y por impulsar la alianza entre Seúl y Washington.
En Filipinas, el gobierno acreditó a Bush por su política exterior que vio el final de la Guerra Fría y resaltó que defendió la libertad; en tanto que en India, el primer ministro Narendra Modi señaló que el expresidente estadunidense sentía pasión por las relaciones sólidas entre India y Estados Unidos.
También, el líder espiritual tibetano, el Dalai Lama, recordó la preocupación de Bush por el pueblo tibetano y la situación en el Tíbet, y aseguró que “su vida fue significativa, dedicada al servicio público.
internacionales
