San Luis Potosí, SLP.- La propuestas iniciales de gobierno del presidente electo Andrés Manuel López Obrador corren el riesgo de caer en la ocurrencia debido a que no se alcanzan a ver estudios que sustenten realmente sus decisiones, sobre todo en cuanto a la creación de superdelegados, la descentralización de secretarías y la cancelación de la reforma educativa.
Estos importantes temas de actualidad se trataron esta semana en el programa Planos Paralelos, que conduce el periodista Leopoldo Pacheco, en Plano Informativo, y en esta tercera entrega tuvo como invitados a los abogados Jorge Chessal y Eduardo Izar.
La experiencia de los invitados arrojó conclusiones sobre la figura de los superdelegados que pretende implantar el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, y en el que los invitados coincidieron en que son en realidad herramientas de control político sobre gobernadores y alcaldes.
El abogado Jorge Chessal consideró que el hecho de que exista un intermediario "pensando que no sea un delegado de la administración pública centralizada sino del presidente, entonces se estaría estableciendo una autoridad intermedia entre los gobernadores de los estados y la presidencia de la República y estas autoridades intermedias no están contempladas, porque el pacto federal se da entre los estados para crear la Federación y no está proyectado constitucionalmente que haya nadie entre uno y otro nivel de gobierno".
Por el lado político, evidentemente, lo que se está buscando y no creo que estemos fantaseando, es muy muy claro, es generar una jefatura política por parte de quien va a estar representando al gobierno federal, para poder eludir a los gobiernos de los estados, para atender programas sociales, fundamentalmente, y fortalecer de esta manera al partido en el poder, es decir, si vemos los que están nombrados, con esta lista de superdelegados, o son los líderes estatales del partido o son ex candidatos a las gubernaturas de los estados, en donde participó el partido de la presidencia, advirtió el abogado.
Respecto a la posibilidad de que Andrés Manuel López Obrador pueda cambiar de idea, Eduardo Izar consideró que "es muy difícil porque él tiene prisa, Antonio Rocha dijo que 6 años son muchos para no hacer nada y muy pocos para hacer mucho. Andrés Manuel va a ser presidente por dos meses menos, él solo lo será por 34, y los quiere recuperar, ya está gobernando, aún antes de ser declarado presidente.