Cada cuerpo es diferente y, por eso, cada barriga también lo es. Los factores que la causan son variados y así lo hacen también las maneras para reducirla. Lo cierto es que un cambio en los hábitos alimenticios y el ejercicio son imprescindibles para deshacerse de ella.
Estos son los tipos de barrigas y también los consejos para reducirlas, según recogen varias webs especializadas en temas de salud:
1. Barriga con michelines
Es el de tipo de barriga de aquellos que llevan un estilo de vida sedentario. Es muy usual en las personas que tienen trabajos de oficina o que, por alguna razón, permanecen sentados por mucho tiempo. Las personas con este tipo de barriga suelen tener poca actividad física, consumen alimentos azucarados, gran cantidad de harinas y exceso de calorías. Probablemente, además de tener más barriga, notarán un aumento de peso en sus piernas y caderas. Para reducirla, conviene bajar el consumo de alimentos refinados y azucarados como las galletas, los pasteles, el pan, la comida rápida, las patatas, las salsas y aderezos, o los refrescos, entre otros. Conviene aumentar el consumo de frutas y verduras, pescado, cereales, frutos secos y bebidas naturales. Es aconsejable excluir el alcohol de la dieta y evitar los alimentos "bajos en grasa" o "light" ya que tienen azúcar refinado, sal y conservantes para darles sabor. Realiza una buena sesión de ejercicios cardiovasculares y compleméntalo con sentadillas, zancadas y abdominales.
2. Barriga por estrés
Es muy común en las personas altamente responsables y perfeccionistas. Este tipo de barriga es fácil de detectar ya que es dura al tacto. Este tipo se da porque al estar estresado producimos una hormona llamada cortisol que estimula al cuerpo a quedarse con la grasa que tenemos situada alrededor de nuestro estómago. Para reducirla conviene no saltarse las comidas, mejorar los hábitos de sueño y combatir el estrés con técnicas de relajación. También realizar actividades placenteras. Es recomendable hacer yoga, caminatas y practica técnicas de respiración profunda. Se debe evitar el consumo de café (solo dos tazas al día) y otras bebidas con cafeína, en su lugar se puede tomar manzanilla u otras infusiones de hierbas. Conviene consumir alimentos ricos en magnesio como lo son los vegetales verdes, las nueces y las semillas.
3. Barriga de embarazada
Es típica en las mujeres que han dado a luz. Se necesitan por lo menos seis semanas para recuperar el tamaño normal. Para reducirla es conveniente consumir suplementos de pescado o ácidos grasos omega 3 así como alimentos ricos en ácidos grasos como nueces, aguacate, aceitunas y semillas de chía. Es recomendable hacer ejercicios de suelo pélvico para aplanar tu abdomen desde adentro hacia afuera. Aprieta y suelta los músculos del piso pélvicos 15-20 veces, en cinco sesiones al día.
4. Barriga hinchada
Las barrigas hinchadas suelen estar planas en horas de la mañana, pero durante el día se inflaman por gases o indigestión. Se debe a intolerancias alimentarias, alergias, mala digestión y no masticar bien los alimentos. Para reducirla es importante averiguar qué alimentos pueden ser la causa de la intolerancia y excluirlos de la dieta. Lo más común es que sean alimentos con trigo y gluten, alcohol, levadura y productos lácteos procesados. Incrementa la ingesta de alimentos ricos en fibra y bebe más agua. La hinchazón también puede indicar un desequilibrio en la flora intestinal. Para restaurarla se recomienda consumir más alimentos prebióticos y probióticos.
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