San Luis Potosí, SLP.- Días después días de la entrada de la Sexagésima Segunda Legislatura, la Comisión de Derechos Humanos del Congreso del Estado, destacó por los posicionamientos sobre el aborto, emanados de su presidente Pedro Carrizales Becerra.
El autonombrado “Mijis”, quien anteriormente había sido señalado por haber emitido que el aborto y los matrimonios entre personas de la comunidad LGBTTTI (Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Travesti, Transgénero e Intersexual), deberían de someterse a consulta, explicó que todo se debió a que “no terminó la entrevista y se quedó a medias”.
Posterior a la aclaración, se pronunció a favor, ya que la decisión solo les incumbe a las mujeres: “Si se despenaliza o no se despenaliza el aborto, la gente va a seguir abortando, si así lo decidieron […] siento que despenalizando, hasta se pueden evitar muchos abortos”.
Luego de que mandara bendecir su oficina, quedó claro que el legislador tiene convicciones católicas, sin embargo, explicó que la decisiones que se tomen en el Congreso, no estarán sesgadas por sus creencias.
“Dios nos dio libre albedrío […] cada quien interpreta la vida como quiere, entonces por el lado de la fe, no se va a influir en mis decisiones, yo sé que este es un tema muy canijo, pero yo no puedo dejar de ser un legislador”.
Por la entrada del próximo gobierno federal y el cambio de las legislaturas, miembros del Frente Nacional por la Familia (FNF), anunciaron una movilización en treinta ciudades para solicitar al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, el “respeto por el embarazo”.
“Sería muy cavernícola, matar un niño para que no venga a sufrir, eso sería sumamente retrógrada en dar como una solución para que un niño no venga a sufrir pobreza, matarlo”, expuso Juan Carlos Torres García, presidente del Consejo Coordinador Ciudadano (CCC) y representante estatal del FNF.
Al cuestionar al activista si habría otras alternativas para las mujeres que han quedado embarazadas tras sufrir una violación, señaló que “El hecho de asesinar al bebé, no va a disminuir el dolor de la persona que fue violada, si tú haces que la chica aborte, no vas a disminuir absolutamente nada el trauma que vivió por haber sido violada, esa no es ninguna solución”.
Torres García dijo que el estado debería de garantizar salud para el producto y también para la familia, además de la dignificación y mejora de la calidad de vida en San Luis Potosí.
Por su parte, Zamira Silva Ramos, integrante de la asociación “La Colegia de Themis”, dijo que más allá de debatir si el aborto es o no un asesinato, la realidad es que se ha convertido es un problema de salud pública.
Debido a la clandestinidad de los procedimientos, es difícil tener una estadística oficial que revele cuantos abortos ocurren en la entidad.
Lo que sí es relevante, es que semanalmente de dos a tres chicas en San Luis Potosí, se acercan a la asociación civil, porque están interesadas en someterse a la intervención.
“Lo van a hacer las mujeres que así lo quieran, aunque no sea legal, lo siguen haciendo en situación de clandestinidad […] aunque el aborto es un tema que tiene un menor tabú, para el grueso de la población sigue imperando la moralidad y la religiosidad”.
local
.gif)
